domingo, 24 de junio de 2012

...Y justo aquí fue.

Las voces críticas contra UPL no paran de crecer. Realmente es que el votante leonesista ya le importa un pimiento lo que se diga desde esta formación. No tanto lo que sucede internamente que es cuestión que muchos quisieran abordar pero nadie da el primer paso. Por ahora...

Que UPL ha dejado de ser un partido leonesista de referencia es evidente para todo el mundo, y los resultados obtenidos demuestran que en el mejor de los casos el voto es personal y no ideológico, incluído el del procurador actual, persona a la que se ha tenido cierto respeto dentro del mundillo leonesista. León ciudad mantiene porque todavía flota ese pensamiento de que si desaparece UPL lo leonés se queda sin voz. En este punto cabe la reflexión ¿acaso hubo avances con UPL gobernando? ¿notan ustedes más reivindicaciones que nunca con UPL en Valladoldid? ni siquiera algunas intervenciones destacables del archivero universitario e historiador llegan al común dado que la prensa de la cero repercusión ¿fallo del gabinete de prensa upeliano o conspiración de los medios? mezcla de los dos. Ni el gabinete de prensa está por la labor de mantener a los que están, dado que ahora cobra la mitad del sueldo que antes, ni la prensa está por dar pábilo a algo moribundo.

Pero hubo un momento clave en que UPL pasó de ser algo reivindicativo a ser un zombi ideológico. Fue precisamente éste, en 2007, cuando todas las comunidades iniciaban un proceso de reforma estatutaria siguiendo el ejemplo catalán:


Hace cosa de cinco años, la Unión del Pueblo Leonés, con mejor salud representativa que la actual, y rodeado de cierto boato y dispendio al estilo heredado del predecesor De Francisco, propuso una reforma del estatuto de autonomía que en su momento pareció hasta buena pero que si se mira con la cabeza muy fría y el corazón también no deja de decir de un modo sutil lo que deseaban sus redactores: nada. Todo perfectamente maquetado y editado en un práctico librillo con la portada que vemos. Llama la atención lo de "un camino constitucional hacia la autonomía leonesa" ¿hay algo más anticonstitucional que la actual comunidad?

Porque básicamente el texto que alberga en su interior es ni más ni menos que añadir reformas y contratextos o añadiduras al texto principal previamente pactado entre PP y PSOE como reforma del estatuto de atuonomía. Sí, había alguna citación a la singularidad leonesa y pretendía romper el binomio Castilla y León en un orden invertido de León y Castilla. Poco más. Nada que no fuera perfectamente asumible por cualquiera porque ni siquiera se pedía o se dejaba abierta la posibilidad de una comunidad autónoma leonesa. No, no aparecía por ninguna parte. Era, ni más ni menos, que asumir que lo leonés camina con lo castellano y esperar que cuanto menos la cadena que nos une sea algo más floja.

¿Razones? solo una. Cuando la dirección fue tomada entre Melchor Moreno y Joaquín Otero, dos bercianos de nulo sentimiento leonesista salvo lo superficial, se dio un giro sutil pero radical. Melchor Moreno militó por muchos años en el extinto CDS, formación que pretendía ser algo intermedio entre el socialismo del PSOE y la derecha de AP (la precursora del PP actual), osea, un partido de centro. Y con tal objetivo tomaron las riendas upelianas, en convertir a UPL en la tercera formación política pero no leonesista. La justificación que tenían se basaba en argumentos bastante simples: el leonesismo no es rentable porque no cuenta con sectores económicos que lo apoyen, no da votos porque es una ideología que se puede calificar de nacionalista si no se miden con mucho ojo los pasos a dar y palabras a decir, te encasilla y delimita tu discurso impidiendo tocar otros temas que bien podrían sumar votos al partido (que no a la causa, matiz importante).

Bajo estas premisas el cambio fue lento y progresivo hasta hacer desaparecer el leonesismo por completo. Se comenzó diciendo que había que cambiar formas, así lo dijo en varias ocasiones Joaquín Otero en el mítico congreso de Astorga, y lo aplaudieron todos. Esas formas comenzaban por dejar de un lado la beligerancia mostrada en Valladolid que diera tanta foto de portada, titular fácil y también críticas desde determinados sectores. Pero bien de veces esas formas eran las que mantenían un espíritu vivo de algo que comenzaba a surgir a nivel político.

En segundo lugar se atajaron los discursos: la autonomía no era el único objetivo, había muchas más alternativas y pasos intermedios. Todos ellos pasaban sí o sí por pedir asumir delegaciones y sedes autonómicas. Da igual lo que hagan o si el impacto económico que supusiera su ubicación, había que tenerlas para contrarrestar un poder de facto vallisoletano que no paraba de crecer. No solo la formación upeliana salía constantemente al paso en cuanto había un mínimo rumor de una nueva entidad o sede pidiendo que se estableciera en León (concretamente en la capital de la provincia con dicho nombre) sino que acusaba a la junta de centralismo y exigía una deslocalización de funciones y poderes. Con ello se lograba un titular sencillo, reivindicativo pero no autonomista. Otero, en la noticia que fue la antesala de su despedida lo dijo muy claramente: "voy a modificar el discurso; si queremos un León fuerte necesitamos una Comunidad fuerte". Así se editó en la entrevista en ABC.


El tercer paso era desvincularse de cualquier reclamación que pudiera calificarse de nacionalista, radical o extremista. Y aquí sí que entraba todo lo demás. Lo primerito el tema de la lengua leonesa, que nunca jamás ha practicado UPL en sus 20 años de existencia, y desde luego que ha hecho todo lo posible por no fomentarla, si exceptuamos los casos de Abel Pardo o Enrique Soto (por cierto, ambos retirados de un modo u otro de UPL). La cosa no paraba aquí, a pesar de que la formación se supone leonesista sin más, no se podía transmitir una imagen ni "agresiva" ni "peligrosa". Posiciones moderadas en todo, absolutamente en todo, imagen de supuesto diálogo que en verdad era silencio y complicidad pasiva. Incluso cuando Otero y Castresana fueron expulsados del partido, ambos siguieron con esa línea de servilismo. Ni qué decir de Rubinat que jamás hizo (ni hace) nada leonesista como concejal. Recordemos que Otero justificó tal actitud en que estaba cansado de presentar enmiendas y que ninguna fuera aceptada. Y tenía razón: se le admitieron muchas enmiendas, incluso personales. A cambio, renunciar al "dije" para decir "diego", como en su última declaración como miembro de UPL: es «absurdo» e «irracional» ir en contra de la Comunidad.

Y así se han ido sucediendo desde entonces. En las filas upelianas ha imperado desde entonces la ley del miedo y el silencio mezclado con abundantes dosis de declaraciones y contradeclaraciones de los mismos que las efectúan. Chamorro en su día dijo no querer saber nada de ser secretario general, al poco se presenta con Moreno. Se dijo que la reforma de estatutos era para hacer más partícipe, democrática y leonesista a UPL, pero los pasos atrás han sido el resultado. Ni siquiera en el plano práctico: el gobierno de coalición PSOE-UPL en el ayuntamiento de León que en el plano leonesista, si no llega a ser por Pardo, se queda en una comparsa de amigos y seguidismo de los socialistas en todos sus disparates. El actual, en poder absoluto del PP, deja a los upelianos sin discursos y sin capacidad de acción. En la capital del Pisuerga lo mismo da tener uno que cien procuradores, al final el balance es siempre el mismo. La última intervención de Valderas es para pedir más subvenciones a los cultivadores de remolacha ¡ojo! de toda la comunidad y asuntos de temas universitarios porque, como siempre decimos aquí, su labor es siempre muy muy muy pero que muy personal.

De muchas cosas fueron acusados Otero, Castresana y Rubinat, como falta de leonesismo, discurso demasiado tibio, y hasta ser algo pro autonomía castellana y otras lindezas que, a modo práctico, son las que ejecuta la actual directiva ¿qué fue de ese Rubinat que decía que con 18 añitos hizo un escrito de anticonstitucionalidad de la comunidad? lo mismo decir de ese Chamorro que se ensalivaba de gusto diciendo lo leonesista que era y lo leal a unas siglas que le han permitido comprarse varias viviendas y algunos otros cargos de procurador judicial en empresas de carácter público ¿dónde queda ese "si los resultados no acompañan, llegado el momento me retiraré"?

Con toda la razón del mundo, el PSOE local de León ha asumido exactamente el mismo ideario práctico de UPL, al milímetro, palabra por palabra y acto por acto. Son tan iguales que es imposible de distinguir cuándo proceden de uno y de otro: el PSOE apuesta por un León fuerte, pide sedes, habla de la lengua leonesa como valor patrimonial, defiende el hecho diferencial leonés pero no pide una autonomía, reniega de la capitalidad de Valladolid y le gustaría que ésta fuera la ciudad de León. Por hacer, hasta acuden a los actos leonesistas como el día de los Héroes Leoneses. Díganme ¿cuál es la diferencia entre una formación y otra? de ello se han dado cuenta muy rápido los del PP, que desde hace 6 años que se han desligado de cualquier tinte leonesista que pudiera haber por medio. El primero de ellos Mario Amilivia ¿se acuerdan de aquellas broncas con el alcalde pucelano? ¿y de esas peticiones de singularidad para lo leonés? tras ser nombrado presidente del Consejo Consultivo (órgano que no vale para nada de nada) dijo al hilo de lo del estatuto :«León en el Estatuto queda como tenía que quedar, como parte de la Comunidad».

La actual dirección upeliana está tan descabezada en todos los sentidos que ya no cuenta ni con apoyos internos. No os engañéis por fotos momentáneas o supuestas reuniones donde están todos los que debieran estar expresando su lealtad al líder. UPL ahora mismo en la práctica es Javier Chamorro y Miguel Ángel Lozano González. No hay nadie más. Uno da la cara y el otro hace de fontanero interno. Lázaro García Bayón practica su particular teatrillo de querer llevarse bien con todo el mundo pero quererse más a sí mismo que nadie, mientras estudia cómo retirarse. Pedro Gallego prefiere centrarse solo en Benavente que el resto le queda muy muy grande, y desde luego que no se le ve mucha personalidad propia ¿no dijo que iba a ser un presidente reivindicativo y luchador por la autonomía? ¿la suya propia? Melchor Moreno mejor que esconda la cabeza bajo tierra de minas porque su pasado es digno de enmarcar, y su presente todavía muy salpicado hasta de asuntos judiciales que en todos los casos le han salido muy rana. El resto, una comparsa a golpe de llamada. Por no tener es que ya no tiene ni siquiera a los mantenidos de UPL como relatamos en otra entrada, que poco a poco van dejando con el culo al aire mediante no asistencia a eventos, no realizar correctamente sus deberes... poco a poco diciendo adiós.

Pretender ser la tercera vía política a lo UPyD, CDS o cualquier otra formación de escasos recorrido ideológico y sí mucha demagogia es la tumba de cualquier partido. No ser leonesista en la práctica y decir que lo eres no da votos, te los quita ¡que se lo pregunten al PSOE! UPL se funda con motivo del leonesismo, no para ser una tercera vía de PP y PSOE o una versión remozada de un centrismo demagógico. No ser nada, lo que es ahora, es el vacío absoluto, y justo aquí, en este punto ideológico, fue cuando UPL ha dejado de ser leonesista. Definitivamente.

miércoles, 6 de junio de 2012

¿Van a dejar de hacer el payaso alguna vez?

Dice el DRAE que un payaso es, aparte del personaje circense, "persona de poca seriedad, propensa a hacer reír con sus dichos o hechos". Este calificativo dentro de la frase que da nombre a esta entrada, fue el que le dedicó Javier Chamorro a Julio Cayón, concejal del PP en León. Y ustedes se preguntarán el por qué.

Haace muuuuuchos años, un todavía algo mozalbete Julio Cayón Diéguez se afiliaba a la Unión del Pueblo Leonés, lógicamente como tantos otros promovido por José María Rodríguez de Francisco, cuyo filtro leonesista era el que todos conocemos. La cosa duró poco, lo justito para que posteriormente se pasara al PP, nada extraño teniendo en cuenta su amplia vinculación con el mundo de las cofradías y que éstas están más que dominadas por el pensamiento ultraconservador tan leonés. Desde entonces Cayón se ha puesto bajo el filtro del "traidor", otro calificativo que es explotado como patrimonial en el leonesismo. Chamorro lo tiene enfilado, rozando el odio sin sentido.

Bueno, razones también tiene, dado que Cayón fue el concejal más ácido y activo en la pasada legislatura contra las acciones de Chamorro, especialmente en la concejalía de jardines. Ahora Cayón es el responsable de los jardines y Chamorro exije su sangre particular. Y en vez de entender que eso entra dentro del juego de la política, prefiere no perder oportunidad para que el uno falte el respeto al otro sin venir demasiado a cuento, más cuenta del líder upeliano que por el pepero. La última viene porque Chamorro pidió una aclaración sobre protocolos de honor municipales, exactamente quién podía portar el bastón de mando municipal en actos públicos. Toda una pregunta de actualidad y que a los leoneses les quita el sueño. Y lo que pasó....queda el vídeo para disfrute de todos.

vídeo obtenido de leonoticias.com

La mala relación entre ambos viene no solo de lo político sino de lo personal. Muy largo de explicar y contar aquí. Resumámoslo en que uno ha malmetido contra el otro en demasiadas comisiones, plenos y hasta en público (y privado que todo se sabe). Espectáculo vergonzoso, como casi todo lo que protagoniza Chamorro, porque hace muuuucho tiempo que ha perdido el rumbo, la calma y muestra su verdadera personalidad, un auténtico dictadorcillo lleno de ira que no ceja de perseguir hasta machacar a sus enemigos ¡que se lo digan a Pardo! pero el rumbo errático del bufoneo leonesista no queda aquí.

¿Recordamos la anterior entrada sobre lo que es el leonesismo social actualmente? carece de referentes políticos claros porque estos no tienen ideología alguna y base de la que partir, y viceversa, creándose un círculo vicioso donde las contradicciones en el discurso provocan la estupefacción a cualquier mente mínimamente inteligente. Se dan demasiadas vueltas al tema de la capitalidad de la comunidad autónoma, cosa que sinceramente este blog no llega a entender porque en la práctica todos sabemos cual es. Tan solo su no existencia oficial demuestra la nula presencia práctica de esta comunidad artificial. El psoe pucelano pide que sea Valladolid la capital administrativa oficial de la comunidad ¿respuesta de UPL? que por historia "León" debiera ser la capital de la comunidad ¿Qué León? ¿la capital de una comunidad que se basa en su negación? ¿pero no se supone que UPL lucha por una comunidad propia y reniega en todo de la actual?

UPL justifica tales palabras en que en el fondo hay debates más importantes, que si se modifica el estatuto debiera hacerse para crear la comunidad leonesa y toda esa mandanga que suena a grito vacío dado que no se la creen ni ellos. Porque ya hubo hasta tres reformas de los estatutos y en dos UPL tuvo poder decisorio y de presentar enmiendas en ese sentido. Ni antes ni ahora hizo nada por ello ¿Dónde está Valderas pidiendo una autonomía?

El actual procurador Alejandro Valderas, quiere darle un toquecito leonesista que no acaba de convencer. Sus últimas intervenciones, como todas las demás, demuestran que navega entra la tibieza de palabras y la profunda preocupación de los temas personales (funcionarios y archivos). Más ejemplos: se aprueba una moción presentada por el PP para la defensa de los productos ibéricos de la comunidad frente a un cambio legislativo que limita tal calificativo a los pura raza porcinos. Valderas apoya la moción pero no porque afecte gravemente a la economía salmantina dado que muchos productores perderían tal prestigiosa etiqueta sino porque "muchos ganaderos tienen los almacenes llenos a punto de estropearse la mercancía". Otro ejemplo ha sido la crítica a los presupuestos autonómicos que discriminan de nuevo al territorio leonés según Valderas. Los datos oficiales dicen que se aumenta para la provincia de León en un 85% (en Salamanca y Zamora no). En verdad el dato es engañoso, basta con invertir en una autovía o vial determinado y decir que se incrementa una barbaridad, pero Valderas de nuevo ha perdido una oportunidad de oro en explicar a todos en qué se ha recortado el presupuesto. El PP con datos en la mano los defiende ¿UPL dice algo?

No, Valderas está para cosas mucho más interesantes. Sus esfuerzos, que deben de ser titánicos porque apenas son visibles para el resto de la humanidad, se centran en cosas como enviar informes que luego resultan erróneos incluso bajo su propia perspectiva: el 1 de febrero es entrevistado en la tele esa autonómica propiedad de Ulibarri, RTVCyL, donde empieza con su desborde de datos sobre las sedes que tiene la junta, afirma sin rubores que lleva detectadas casi 400 sedes de la junta. Meses después la cosa se refina y pasamos de más de 400 a unas 300 y pico. Luego se baja tal cantidad de sedes a un número inferior dado que no todas son de origen comunitario sino estatal, queda en 168. El número de empleados es cerca de 2.000, lo cual nos da como cifra una media de 12 trabajadores por sede, hecho que difiere y bastante de la realidad viendo cualquiera de esas sedes. O falla la investigación o fallan los datos. O falla Valderas. El interrogante es que, de ser cierto lo dicho, saldría en prensa ¿verdad? pues no, únicamente ustedes podrán leerlo en la web de UPL.

Llegamos al remate de la minería, uno de los eternos problemas de la provincia de León y que está abocado al fin trágico. Seamos sinceros: la minería leonesa no es muy leonesista, más bien están por su lado y el resto les importa poco o nada. Todo lo contrario de la asturiana que no se averguenza de enarbolar su bandera en todos los actos. Además, a pesar del gigantesco apoyo social que reciben, en general la imagen y actitud de la minería parece más erradicada en una lucha a lo siglo XIX con pasamontañas incluido que a un problema vigente en el nuevo milenio. Parte de la culpa es suya, cuando la reforma del sector energético proponía el fin del carbón en los años 90, los mineros leoneses abrazaron a los asturianos como hermanos, a pesar de que las diferencias entre ambos son significativas: minería pública asturiana frente a privada leonesa, hulla asturiana frente antracita leonesa con mayor poder calórico, costes sobredimensionados de los asturianos (por ser pública en su mayoría) frente a escasas diferencias con un carbón rentable a nivel internacional del leonés. Ambos bandos, vistos bajo el mismo prisma y aplicando la estadística dio como resultado un "yo tengo 10 y tu tienes 2, cada uno tenemos 6". Consecuencia de no ver las cosas en clave leonesa.

UPL dice que apoya las movilizaciones de la minería y que acudirá con los mineros a Madrid en la manifestación, Chamorro y Bayón en amor y compañia ¿ustedes les vieron? o se escondieron mucho o ni siquiera aparecieron. Bueno, ni ellos ni casi ningún otro político. Conocido es el escaso talante de tolerancia de la minería con la clase política, con casi toda, porque los de IU podían caminar a sus anchas ¡qué cosas! en el fondo todos los partidos han sido cómplices de no haber sabido aprovechar los fondos de reconversión minera para generar auténticas alternativas laborales, y el mejor ejemplo es Villablino: municipio minero (gobernado por muchos años por IU) que este año ha perdido casi un tercio de su población y la cosa sigue sin freno ¿alternativas? ni una sola industria. De fondo un Victorino Alonso, el mayor propietario de Europa de minas de carbón, que encima es el empresario víctima de malas decisiones. Negro panorama tenemos cuando son portavoz y ejemplo personajes tan singulares.

¿Nos queda algo positivo del panorama? sí, un aeropuerto de la provincia de León que ahora que salen ayudas parece recuperar alas y hasta tiene varios pretendientes. Good Fly se ha quedado por ahora con el grueso del pastel y afirma que igual monta su sede en León (y vamos y nos lo creemos). Entonces aparece la compañía Air Nostrum, la misma que hace cuatro días cerró vuelos por no ser rentables, ofreciendo más que ninguna. Y de remate una supuesta carta de Ryanair que quiere estudiar posibles enlaces con León, tras 3 años de aquellas míticas negociaciones de Abel Pardo con los irlandeses y que por problemas de traducción (da la risa) se quedó en el cajón del olvido. Recomendable la reflexión de Javier Callado donde da con bastantes puntos clave.

En lo leonesista ¿algo más positivo? de momento no. Y por las últimas informaciones que circulan este blog cree que el verano va a ser muy pero que muy caliente y no precisamente por avances sino por todo lo contrario. Si se cumplen las previsiones veremos una fractura brutal en UPL que para muchos será un muerte anunciada, para otros más de lo mismo y para otros hasta una alegría. Veremos a un leonesismo social que quiere asomar la cabeza como tercera fuerza haciendo labores políticas que le pasarán factura a medio plazo. Y veremos a un grupo de descolgados que van a retomar el vuelo y darán demasiados disgustos a otros ¿a qué nos referimos? paciencia.

De mar de fondo, ya casi en plan playero, el espectáculo leonesista que no cesa ¿dejarán nuestros políticos leonesistas de hacer el payaso alguna vez?