miércoles, 18 de agosto de 2010

Verano caliente

Verano caliente, calor sofocante. Nada mejor que reunirse por las tardes en esos maravillosos espacios frescos con sombras mientras se bebe una cerveza y se conversa de lo divino y humano. De lo divino que es uno y lo humanamente malo que son el resto. Con estos razonamiento ha vivido la sociedad leonesa desde tiempos inmemoriales, esta sociedad leonesa, tan cainita ella, para lo bueno y lo malo. Un leonés se une con otro para hacer el mal y destrozar a ése que considera su contrario. No importa si en el camino muere o pierde más de lo que gana, si el otro quedó peor.

Las vacaciones veraniegas dan para mucho. Isidoro García, la cabeza más o menos visible de UPL en Sariegos dice adiós. Oficialmente porque quiere dejar paso a caras nuevas y centrarse en su vida personal y laboral. Extra-oficialmente se dice que está un poco quemado, que esperaba algo diferente de la nueva directiva, y, sobretodo, que ve en UPL un partido con futuro muy negro. Persona de muy buenas relaciones con su tocayo alcalde de Acebedo, Isidoro Díez, otro hombre que medita seriamente su futuro, tanto en UPL como en general en política. No son los únicos. Habrá algún adiós más que querrá ser suplantado por "caras nuevas". Lo veremos.

Todavía sin definir del todo está el futuro de Enrique Soto en Astorga y más exactamente lo que sucederá con UPL en la ciudad maragata. Él dijo que se retiraba, que tal y que cual, pero aparte de tener muchas caras, es hombre de calentones y mucha soberbia que con el tiempo cura por sí mismo. Peyuca se lo come todo en este terreno, especialmente por sus habilidades sociales, que le hacen participar de la amistad y simpatía de muchos leonesistas. Esto no quiere decir que consiga subir en votos, es más, bien pudiera no repetir concejalía, pero si en leonesismo hablamos está muy claro quien gana y quien pierde. Por ahora...

En Zamora empiezan a adolecer del problema que llevan arrastrando desde hace casi cuatro años: falta de organización. Muy lejos van a quedar los resultados de otras elecciones, donde UPL obtenía excelentes resultados y múltiples concejales por casi toda la geografía zamorana. La razón¨oficial¨ puede decirse que es lo de todas partes, el desmantelamiento y reorganización del partido. Pero la real es que sus militantes, con muy buenas voluntades y mejor espíritu, sin embargo carecen del toque político necesario para patearse los pueblos y localidades creando listas. Y el leonesismo vive de una cosa y de la otra. Ni que decir tiene que la dirección al día de hoy no ha dado un solo gesto de apoyo salvo alguna comida esporádica. Y las habilidades sociales de Chamorro son más bien escasas (por no decir nulas).

El club de los 7 sabios sigue con sus andanzas. En conferencias organizadas por Emilio Gancedo en Sabero (obviamente su nombre no aparece pero...), exponen su asturleonés al que quieren adornar de academicismo llamando a Ramón Morala, catedrático de la Universidad de León, que ha manifestado infinidad de veces su posición contraria a lo del leonés...salvo cuando hay dinero por medio. A los eventos se sumarán, como no podría ser de otro modo, Fernando Álvarez-Balbuena García, Nicolás Bartolomé Pérez y las asociaciones amigas Furmientu, Facendera y La Caleya, que hablan sobre justificar su existencia. Todo en casa en unas jornadas donde el objetivo será vender un frente común de hombres buenos, cultos y preparados que venderán su proyecto de nación pan-astur, eso sí, solo en lo lingüístico, no vaya a ser que los tachen de políticos y demás calificativos tan insultantes, que del tema saben un cuanto.

Porque como buenos leoneses que son (casi todos ellos), se unen para hacer fuerza contra otro, que no en pro de algo. Otrora esta gente jamás pisaría un suelo donde no se hablara leonés en un estado de tal pureza que hasta pedían denominación de origen geográfica específica (cepedano, cabreirés, sanabrés), para ahora acercarse a otros lugares que hubieran rechazado hace escaso tiempo. Ya no pronuncia el asturiano Álvarez-Balbuena aquellos discursos que descalificaban las posiciones de la Universidad de León sobre la lengua (y al propio Morala), o consideraba a determinadas personas y colectivos como gente de buena voluntad pero nula formación. Atrás también están esos días donde Morala consideraba al leonés un dialecto del castellano, un romance sin evolucionar, o un simple reclamo político del leonesismo. Lejos quedan los días en que Nicolás Bartolomé escribía en revistas del nacionalismo asturiano sobre leyendas, mitos, cuestiones célticas y el "asturianu de Lleón". Atrás están esos momentos donde el líder espiritual de Facendera, Xosepe Vega, planteaba a varias personas leonesistas ("con pasta" como le gusta decir) una autonomía con Asturias creando un partido propio y una hoja de ruta con pasos a seguir. Muy en el horizonte duermen los días en que Emilio Gancedo calificaba en tono jocoso la habitación de Chao y sus decoraciones sobre la Guerra de las Galaxias. Ya imposible de localizar esos enlaces de la web de Furmientu a partidos del nacionalismo asturiano que reclamaban la independencia asturiana y a la vez calificaban lo leonés como lo más castellano. Un poco más cerca pero lejos también, son los días en que un tal Héctor García Gil afirmaba que el leonés tenía demasiados rasgos del castellano del norte mientras defendía con pasión lo asturiano.

Calentones hay muchos. El calor dilata todo: desde las neuronas hasta las vías de un tren, impidiendo el normal devenir de las cosas. Buscando por internet sobre este blog es posible localizar este otro blog fruto o de un calentón, pero no veraniego sino genético. O esto otro. De nuevo dar las gracias por todos esos comentarios, con insultos o sin ellos, sobre la autoría de este blog, pero no han acertado mucho. En fin, disfrutemos del verano y sin calentones, que pasa rápido. Saludos desde unas hermosas vistas sin muchos árboles pero grandes montañas. Galicia también puede ser así.

jueves, 5 de agosto de 2010

Un tranvía llamado deseo

Dice una frase que "a los amigos hay que tenerlos cerca y a los enemigos aún más cerca". Gran sabiduría la popular. Quizás por ser "popular" lo haya ignorado el equipo de gobierno municipal de León en su vertiente socialista.

El tema del tranvía se vende como una grandísima inversión que llega como maná gracias al Plan E y FEVE. El PSOE esperó tantos años en tomar el poder que ahora tiene demasiadas ganas de demostrar que quiere y puede hacer grandes obras. Ya en la toma de posesión de los concejales el revuelo laboral fue notorio en algunas concejalías como la de Hacienda, donde los movimientos físicos y síquicos fueron más que notables. Aquí se cuece todo lo importante de cualquier ayuntamiento, y los que trabajan ahí lo saben muy bien. Por eso si además tiene a una persona con suficiente inteligencia -y también algo de maldad- tendrás un potente explosivo de polémicas.

Ahora imaginemos por un momento (ojo, solo imaginemos ¿de acuerdo?) que en esa concejalía trabajara una persona con afinidades a cierto partido muy popular. Imaginemos que esa misma persona estuviera metida en absolutamente todo lo que se cociera de cierta importancia en el ayuntamiento cazurro. Supongamos que el poder en la sombra acumulado por esta persona fuera tan grande que incluso se atreviera a decir al ayuntamiento cómo gestionar los gastos e inversiones del mismo en un informe muy significativo.

Ahora imaginemos que llega un concejal que es consciente de ello y además es de un partido rival. Y decide cortar las alas de esta ave altos vuelos y ponerla en un rincón. Digamos que a esta persona se le relega de todas esas funciones que tenía asumidas por tanto tiempo. Lógicamente esta persona guarda el momento oportuno de atacar. Primero con cosas pequeñas, sin importancia, sabiendo muy pero que muy bien dónde poner el dedo en la llaga. Digamos también que durante un tiempo prepara su contraofensiva cubriendo todos los flancos, formando hasta una asociación de comerciantes y vecinos que puede ser fantasma o tremendamente operativa según interese. Y digamos que todo ello desemboca en la denuncia contra el tranvía. El resto: paralización de obras, denuncia judicial y larga agonía de espera para la resolución final.

Sin lugar a dudas en la denuncia hay mucho de político y nada de interés por el bien municipal y de todos los contribuyentes, pero qué duda cabe que lo del tranvía será la soga del PSOE que salpicará a UPL. Por ejemplo: se empieza a saber que llevará catenaria, que en palabras llanas es un montón de cables por el aire. Tantos años de obras para retirar cables y ahora se vuelven a instalar todavía más voluminosos. Se sabe que al concurso de explotación se quisieron presentar tres ofertas y al final solo quedó la de Acciona (la que explota los jardines) porque las otras ni vieron rentabilidad ni un proyecto convincente. Y se sabe que la explotación será por 40 años, cifras que recuerdan las concesiones de autopistas de pago con las consecuencias que todos conocemos.

Por medio del fregao hay una presidenta de asociaciones de vecinos que, hablando por boca de todos los vecinos, defiende el proyecto y critica la denuncia y la asociación, aunque muy poca gente conozca a esta mujer y menos aún cómo y por qué puede hablar por boca de todos. Hay también un PSOE muy rebotado que ve peligrar una inversión millonaria que cuesta, según La Crónica, 17.000 euros diarios. Y finalmente una Junta que ha puesto todas las zancadillas posibles y legales a cualquier aspiración de protagonismo del alcalde Francisco Fernández, sea un tranvía o sea una caja de ahorros.

El tranvía, más exactamente "tren urbano", podría ser positivo si fuera para todo el alfoz de la ciudad y comunicara lugares como La Virgen del Camino o Villaquilambre, pero las prisas de los socialistas por sacar su proyecto estrella y gastar esos millones llovidos como maná, hacen que todo se escenifique como una locura sin sentido. Locura que es apoyada por su socia UPL, que en un pacto de lealtad nunca visto apoya hasta lo que puede perjudicarla indirectamente. Eso es lealtad a un amigo y no a unas ideas.

Porque de ideas UPL y su dirección, plasmada en el equipo de gobierno municipal leonés, anda muy escasa. No critica que se ejecuten con más de 80 millones de euros un proyecto poco viable que bien se podría gastar en eso que tanto le preocupa como es el Palacio de Congresos. También, en su labor de representación, podría reclamar algunas cosas que eran parte del programa electoral como la peatonalización de la Avenida de los Cubos, ejecución de la ronda interior, el palacio de hielo, el pabellón de deportes autóctonos...y así una larga lista de proyectos que UPL tenía en cartera y de las que se ha olvidado.

Como se ha olvidado de que gobierna gracias a un pacto que perseguía unos principios, aquí tantas veces reflejados y recordados. Por no acordarse no se acuerdan ni del 1.100 aniversario de nuestro Reino de León. Hoy, Emilio Gancedo nos ofrece un reportaje donde denuncia el total desconocimiento para los visitantes sobre eso del reino y los 1.100 años. Y como ya dijimos aquí, por no haber es que no hay ni información en internet. Cuando la incompetencia e incapacidad para ejercer de leonesista toma el poder, el resultado tan lamentable es éste. Un resumen completo de lo que se ha hecho hasta la fecha bajo esta fundación está recogido en la wikipedia. Que cada cual saque conclusiones.

Un tranvía llamado deseo. Para los socialistas el real. Para los leonesistas otro más metafórico pero real, de monarquía, de reino e imperio que otros cien años más tendrá que esperar a que aparezca quien sepa ponerlo en el lugar de la historia que merece.

lunes, 2 de agosto de 2010

Datos para la reflexión

En este mes de agosto, que apunta a que será más bien movidito en cuanto a temas de política general, y muy especialmente en la provincia de León, sería conveniente hacer una pequeña reflexión sobre los pasos dados en cuanto a leonesismo hasta el día de hoy en lo que se lleva de legislatura.

Algunos critican que el leonesismo político parece circunscribirse a la ciudad de León, pero para bien o para mal es el referente y faro del leonesismo. Tal hecho, evidente para la inmensa mayoría, parece escapar a la nueva directiva. Entiéndase la nueva directiva como la que está ahora mismo. Lo que suceda en Astorga, Zamora, Villafranca, Benavente, Salamanca, La Bañeza, Cistierna o cualquier otro municipio queda en la nota de prensa o noticia breve comarcal mientras que lo que sucede en la capital cazurra es titular y editorial de todos los medios, incluyendo los ajenos geográficamente.

Recordemos: el pacto PSOE-UPL se firma única y exclusivamente porque se querían dar pasos serios hacia la autonomía. A tal extremo se redacta un documento cuya autoría es en su gran mayoría de mano de Abel Pardo. El texo, rubricado por ambas partes, decía lo siguiente:

En el marco del Pacto UPL–PSOE para la gobernabilidad del Ayuntamiento de León en la legislatura 2007-2011, los Grupos Políticos Municipales de la Unión del Pueblo Leonés y el Partido Socialista Obrero Español en el Ayuntamiento de León acuerdan:

PRIMERA.- El gobierno municipal promoverá el reconocimiento de que la existencia del pueblo leonés, uno de los más antiguos de Europa, conformado por una cultura, lengua, historia y señas de identidad propias y diferenciadas, del que la ciudad de León forma parte, le confiere el derecho a decidir cuál es su estatus jurídico dentro de la España de las autonomías.

SEGUNDA.- El gobierno municipal promoverá el reconocimiento de que la Comunidad Autónoma actual, compuesta por el pueblo leonés y el pueblo castellano, no es la que refleja el sentir mayoritario de los ciudadanos leoneses, ni la más adecuada para los intereses de la ciudad de León.

TERCERA.- El gobierno municipal promoverá, desarrollará y promocionará las señas de identidad leonesas, su cultura tradicional, su lengua y su historia, tanto en el marco de la ciudad de León, como en la proyección exterior de la misma.

CUARTA.- El gobierno municipal fomentará el reconocimiento de que el actual marco autonómico no está cerrado, promoviendo cuantas iniciativas se plantee para que se avance hacia la constitución de una Comunidad Autónoma Leonesa.

QUINTA.- El gobierno municipal asumirá el compromiso de que el Ayuntamiento de León incentivará y se comprometerá a asumir el máximo nivel de competencias, especialmente procedentes de la Comunidad Autónoma actual, exigiendo las partidas presupuestarias suficientes para poder desarrollarlas.

SEXTA.- El gobierno municipal fomentará y desarrollará programas de colaboración, especialmente en materias relacionadas con nuestras señas de identidad, con el resto de territorios leoneses, y especialmente con aquellos pertenecientes a las provincias de Zamora, Salamanca y del Distrito de Braganza en Portugal, con cuya capital estamos hermanados.

SEPTIMA.- El gobierno municipal perseguirá la defensa del reconocimiento del marco territorial del Reino de León como NUTS-2 dentro de la Unión Europea al ser el marco más adecuado para nuestros intereses económicos y el que se corresponde con nuestra identidad como pueblo diferenciado.

OCTAVA.- El gobierno municipal promoverá la creación de un órgano de estudio, en el que se invitará a la administración central, para contemplar cuál es la vía que en su día dejó abierta el Tribunal Constitucional para la creación de la Comunidad Autónoma Leonesa.


A ojos fríos, es toda una hoja de ruta para lograr, o al menos establecer los primeros pasos serios y firmes, hacia la autonomía leonesa. Pardo es entrevistado en el antiguo o El Mundo La Crónica de León (21 de junio de 2007) iniciándose con este textos:
Medio país habla de la posibilidad de que León se convierta en comunidad autónoma y él fue quien redactó el texto del pacto que ha obligado al PSOE leonés a asumir este objetivo leonesista.

Con un objetivo tan ambicioso, Pardo incluso escribe una tribuna en que refleja estas intenciones. También con unos textos para el recuerdo:

¿Que el reto es grande? Por supuesto, pero para ello nos hemos presentado a las elecciones y para ello nos han votado los ciudadanos; para avanzar, para que la autonomía esté cada día más cerca, para que se hagan políticas de las que los ciudadanos se sientan orgullosos, y para que los leoneses no tengamos jamás que volver a estar pidiendo perdón por serlo.

La vía está abierta, los documentos firmados, y los programas son claros. Y si alguien tiene alguna duda, yo se la aclaro. Sí, vamos en serio.

Se reparten cargos, funciones y tareas. Todas ellas supuestamente encaminadas a alcanzar esa autonomía. Era lógico que saltaran toda esa recua de enemigos de lo leonés que se presentan como amigos, y no lo son, o como abiertamente enemigos sin tapujo alguno. No importaba, todos ellos eran fácilmente identificables y rebatibles. Difícil combatir si el enemigo es uno mismo.

La cosa avanzó en el tiempo, pero no en el fondo, pues ni un solo paso en tal sentido se dio. Esta visión es algo tan evidente y tangible por cualquier observador que así lo recogía El Mundo en febrero de este mismo año:



En esos momentos UPL estaba sumergida en una vorágine de cainismo de cara a unas elecciones internas donde hubo de todo menos debate leonesista. Ya ha pasado ese momento. Y seguimos exactamente igual. Ahora mismo no vamos a decir qué ha hecho cada uno, porque los hechos están ahí a libre disposición de quien los quiera ponderar.

Y los hechos apuntan a que todo seguirá igual, o sea, peor. La nueva directiva no hace un solo gesto leonesista. Para una concentración que convoca (Rodiezmo) se convierte en un fiasco al que no asisten ni los afiliados con derecho a voto por los que tanto purgaron e incidieron. Los contactos para avanzar la mejora de resultados electorales no son precisamente los idóneos. Y si hemos de hacer un balance sobre los actos leonesistas hechos hasta hoy por cualquier de los concejales de UPL, nos daremos cuenta que no se ha hecho ni uno solo. Quizás la pequeñísima excepción, aparte del defenestrado Abel Pardo, sea Enrique Soto, aunque los poquísimos gestos hechos han quedado desvirtuados tras sus actitudes y declaraciones durante y tras las elecciones internas del partido.

Algunos querrán recordar en este momento la polémica de los quesos donde UPL se limitó a seguir la rémora marcada desde los medios como ha hecho en demasiadas ocasiones,al rebote de todo lo que huela a castillo sin más argumento de fondo. Otros querrán hablar del tema de Sama-Velilla, pero quien de verdad ha luchado ha sido la plataforma, que sigue en pie de guerra con o sin UPL. ¿Queda alguno más? Sí, el tema de la fusión de cajas, aunque el papel jugado por UPL junto con declaraciones que siempre olvidan que se fusionan dos cajas leonesas, hace que más que reivindicar en la polémica, cree más fango. Y así, lamentablemente no hay nada más.

UPL guarda un extraño silencio ante el sector minero, sin propuestas ni planes por parte de la formación leonesista. UPL está callada ante el fin de las ayudas PAC y el futuro del sector agroalimentario, mayoritario económicamente en la mayorái geográfica del País Leonés. UPL no tiene explicación a que los fondos E se destinen a obras multimillonarias en la ciudad de León para hacer un tranvía que está bajo la lupa de la justicia, en espera de yacimientos arqueológicos posibles y con la ira de miles de ciudadanos que no lo quieren ni en pintura. UPL no aporta nada en el tema de la pérdida de población ni sabe qué decir ante unos niveles de despoblamiento alarmantes, porque al día de hoy esta formación jamás ha hecho una sola propuesta aunque sea disparatada. UPL no se ha enterado de que hay sobrevolando un hipotético cementerio nuclear que nadie quiere, porque no dice nada.

Algunos lo justifican en que al ser un partido pequeño no tiene alcance en tan grandes decisiones. Pero se tenga o no, lo importante es que la ciudadanía sepa la potencialidad decisoria que se tiene y qué futuro se desea para todos los leoneses. Por contra prefiere centrarse en otras cosas y con gestos tan desagradables, que poco invitan a repetir confianza.

Por ello, y a falta de poco más de seis meses para que haya unas elecciones, son ya muchos los votantes que tienen decidido su voto. Para algunos será retirarlo a una formación que no ha movido un dedo por esta tierra ni por lograr su autonomía.Para otros, comprometidos con el leonesismo, optarán o por votar a otras formaciones leonesistas más marginales o por quedarse en casa. En cualquier caso, y aunque queda tan poquísimo tiempo, todavía tiene tiempo para demostrar que le queda algo de aquello que motivó su fundación.

El más terrible de los sentimientos es tener la esperanza muerta (Federico García Lorca)