viernes, 5 de noviembre de 2010

No leonesistas

Dice el DRAE que "leonesismo" es "locución, giro o modo de hablar propio de los leoneses". Y da también una segunda definición que es "amor o apego a las cosas características o típicas de la región leonesa". Conceptos ambos tremendamente curiosos, porque es más o menos lo mismo que se dice para "galleguismo" o "catalanismo".

Más curioso todavía es que existen las palabras "galleguista" y "catalanista", pero no "leonesista" ¿por qué? porque quizás al día de hoy los políticos que lo ejercen son...¿ninguno?

Demasiadas veces el leonesismo no ha sido "amor a la región leonesa", sino respuesta a un segundo. La primera gran declaración leonesista, la del 4 de agosto de 1873, basa la defensa de la identidad leonesa frente a la castellana y no como defensa en sí misma. Posteriores declaraciones aparecidas en prensa basan siempre su hecho de lo leonés frente a otro que ataca la identidad leonesa, ya fueran asturianos, gallegos o los siempre presente castellanos. El victimismo como base ideológica y argumento.

Y el leonesismo político siempre se ha alimentado de ese hecho. Por eso también el cainismo, la traición y el vacío práctico de ideas es la constante en el leonesismo en general, sea el partido que sea.

Luis Herrero Rubinat se forjó en esto del leonesismo desde joven, progresó y avanzó hasta ser una especie de histórico referencial. Se rodeó de leales que lo apoyaban y levantaban en los momentos más duros (léase por ejemplo hace 7 años con ciertos roces con De Francisco). Todo el mundo sabe que Rubinat nunca tragó a De Francisco, y viceversa. Aunque curiosamente fuera el primero quien se uniera al segundo tras su fracaso electoral.

Rubinat tuvo sus mantenidos y leales. De ellos uno de los más destacables fue Juan Manuel Arias Alcoba, actual concejal de UPL en San Andrés. Otro era Carlos Saldaña Hidalgo, auténtico tejedor en la sombra para Rubinat, era su fontanero particular para todo momento y especialmente los congresos. Sumemos a Valentín Fernández Soto, secretario de grupo de UPL en diputación de León. Estos tres personajes (sobre todo los dos últimos) hacían los contactos y garantizaban que Rubinat estuviera siempre en el candelero. Con ello Rubinat pasó de ser el chico leonesista aventajado que presentó recursos legales contra la comunidad, a ser un hombre que trabajaba y luchaba únicamente por preservar su cuota de poder, a saber, concejal en San Andrés y diputado provincial.

Llegan las luchas intestinas tan típicas de la UPL, el poder se iba diluyendo y Rubinat veía más cerca ser lo que siempre quiso: mandamás del leonesismo. Tal sueño se hizo casi realidad con el poder de Joaquín Otero, que le garantizó su modus vivendi y todo lo que quisiera a mayores. Con Rubinat ascenderían Manuel Arias, que iba cogiendo más y más peso en el partido. Carlos Saldaña, el hombre a la sombra, se garantizaba seguir como le gustaba estar, sin mucho esfuerzo y cobrando un sueldo como liberado en el ayuntamiento de San Andrés, leyendo prensa y controlando los chismorreos y diretes para luego cascarlos al jefe. En eso es todo un experto. Y Valentín a seguir leyendo el periódico en el cuarto de la UPL para cobrar más de 2.000 euros al mes.

Pero Rubinat es apartado del único puesto como diputado que tenía UPL en 2007, y ponen a Bayón. Se esgrimieron muchos argumentos, que si Rubinat era representante de un municipio fuera del ámbito de diputación, que si llevaba demasiado tiempo, que era hora de nuevas caras...todas justificaciones absurdas esgrimidas por Moreno y Chamorro para quitarse de en medio a un rival poderoso. Porque este blog insiste: el sr. Melchor Moreno es todo un lobo con una piel de cordero tan bien puesta que casi se fusiona con la propia.

Rubinat intenta mover pieza, se alía con Otero y Castresana, el dúo de procuradores unidos por un interés extraño (¿quizás inmobiliario?), y se crea eso de los "procuradores leonesistas" al que se apega un concejal que ni siquiera es procurador conformando la foto más esperpéntica de la historia de la política. Su imagen quedó no tocada sino destrozada. Difícil justificar una palabra de aliento al jefe por parte de Manuel Arias, Carlos Saldaña o Valentín Fernández. El concepto de "traidor" está fortísimamente arraigado en el pensamiento leonesista y a quien se lo pongan que se despida de todo. Finalmente, y sin juicio alguno ni reglamento diferente del artículo 33, Rubinat es expulsado. La tumba se llena de tierra y se sella con lápida.

Pero Bayón, hombre astuto donde los haya, empieza a maniobrar en la diputación. Lo primero es garantizarse que Valentín Fernández, el controlador por antonomasia de pueblos y pedanías de León, se quedara fuera pero dentro a la vez. Es muy útil en los planes de Bayón. Le confirma como secretario de grupo. Y Valentín Fernández, desesperado por buscar trabajo para su mujer y mejorar su status de vida, se lo agradece de mil amores. Carlos Saldaña es otra persona que hay que mantener callada y tranquila: confirmado como secretario de UPL en San Andrés haciendo exactamente lo mismo. Y acallando la tercera voz, Manuel Arias, simplemente se le asciende a portavoz y nuevo jefecillo del partido en la tercera población de la provincia leonesa.

¿Lealtad? ¿Y eso qué es?

El congreso de la renovación upeliana dejó muy claro estos movimientos donde la unión y la falta de ideología y sí la búsqueda del sustento propio es lo que une a estos personajes. Valentín Fernández ha sido relegado a un segundo plano muy lentamente. Tan tan lentamente que casi no sale elegido para el nuevo Consejo General de UPL. Carlos Saldaña Hidalgo movió muchas piezas e hilos, es un hombre muy astuto y se ganó en silencio el apoyo y confianza de Moreno y Chamorro. A cambio de venderse por un buen montón de monedas, consigue 66 votos, justo los mismos avales presentados. Eso es control y lo demás tonterías. El tercero, Manuel Arias Alcoba, se quedó fuera, con el pírrico resultado de 22 votos. Él mismo se sorprendió tanto que no ocultó su decepción diciendo frases como "me han hecho una p....."

De los tres judas rubinatescos hay uno que es muy pero que muy listo. Nuestro amigo Saldaña juega muy fuerte. Es todo un leonesista político: cainita y fácilmente vendible a cambio de un plato de comida. Es más, se dice que realmente Saldaña ni siquiera ha roto completamente los lazos con Rubinat, y que mientras los otros o ni le miran o cambian de acera para lo verlo, muy vez en cuando Saldaña saluda, habla y conversa intercambiando información con su antiguo mantenedor. Como un vampiro, Saldaña vive en la sombra más oscura porque la luz solar le abrasa y desintegra.

Pues bienvenido a la luz.

Pero no clavemos estacas a Carlos Saldaña. No hagamos una cruz para crucificar a Valentín Fernández. Ni martiricemos a Manuel Arias. Solo son el fruto ya demasiado podrido de una supuesta ideología que ni siquiera es capaz de poner la palabra "leonesista" en el diccionario. Porque en el fondo, muy en el fondo, y aunque lo nieguen, jamás de los jamases fueron leonesistas. El sentimiento amor, que es la máxima expresión de apego y afecto a algo o alguien, proyectado a lo leonés implicaría renunciar a comodidades y bienestar otorgado por el status quo actual. Los que han manifestado ese sentimiento dentro de UPL lo han pagado muy caro.

Leonesista a lo UPL lo puede ser cualquiera de cualquier ideología. Tenemos cantidad de ejemplos de políticos que de vez en cuando llevan un pin con un león, menos veces enarbolan una bandera del reino y todavía más raramente decir alguna soflama de exaltación de lo leonés y lo malos que son en Valladolid con su gobierno juntero. Y con eso pueden decir bien orgullosos que son leonesistas, a fin de cuentas cualquiera de UPL es a lo que se limita hacer ¿Qué político leonés no lo ha hecho en algún momento de su trayectoria?

Sentir amor por esta tierra, comprenderla en su extensión geográfica más allá de la provincia, trabajar y luchar por ella independientemente de lo que hagan o digan otros gobiernos superiores por alcanzar un gobierno propio que de respuestas eficaces a nuestra realidad...y no venderse por un puñado de garbanzos..todo eso muy pocos pueden decirlo con la conciencia tranquila y en voz alta.

De los primeros hay demasiados nombres. De los segundos el filtro del tiempo va dejando cada vez menos. En eso consiste separar la paja del grano: en quedarse con lo poco bueno para cosechar en el futuro todavía más.

¿Si no existieran las autonomías existiría el leonesismo político?


P.D.: Elena Martínez Arias, la mujer agredida por Melchor Moreno, fue suspendida de militancia por denunciar ese hecho. Moreno fue aplaudido y alabado por esa decisión. Tras una sentencia del Juzgado Nº5 de León que le condena a 3.600 euros ni un solo órgano del partido ha tomado decisión alguna sobre Moreno o de al menos retirar la suspensión de militancia de la víctima. Esto es UPL. La opinión es ya generalizada.

11 comentarios:

  1. El día en que UPL ejercite los estatutos, renovados o no, nos irá a todos muchísimo mejor. Que ya cansa toda esta gentuza que vive del leonesismo y jamás de los jamases han hecho nada por esta tierra.
    Por cierto, Rubinat se dedicaba hace no demasiados años a decir que él era de izquierdas y UPL un partido de burgueses. Las vueltas que da la vida.

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  2. La vida te da sorpresas y los que parecían una piña ahora se dan puñaladas por la espalda sin ningún tipo de miramiento. Del "palanganero" hay mucho que hablar, tiene modos de mafioso mientras silba la canción que da imagena CyL. ¿que nuevas sorpresas nos depara la UPL? ¿comerán todos juntos el turrón compartiendo mesa y mantel en algún lujoso hotel de nosecuantas estrellas?. Llevarán las navajas en la liga las señoras? Marca Tous, por supuesto. Vivir para ver. Primero se quieren, después se pegan y se denuncian... Pelillos a la mar.

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  3. La UPL no es un partido leonesista. Mi voto no será para ellos, no se lo merecen.

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  4. Es vergonzoso que UPL ejercite el concepto de justicia de un modo tan patético y lamentable. Ni hace caso de las sentencias judiciales ni de sus propios estatutos que impusieron contra viento y marea.
    UPL cava su propia tumba y de ello solo su actual directiva será culpable. Han tenido tres años de oro para demostrar su leonesismo y nos están arrastrando a todos al lodo. Felicitaciones a Chamorro, Moreno, Bayón y cia.

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  5. Creo que la abstención tendrá a muchos de nosotros como participantes activos. Siempre ha votado leonesista y por ello nov otaré a la UPL. Yo no voto a partidos que están en León pero que no son leonesistas, porque ya puestos ¿Qué diferencia a la UPL del MASS? Pues que siendo los dos de León el MASS en estos momentos es bastante más revindicativo.

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  6. Anónimo del 9-11-2010, 23:50...

    ¿Cuándo hablas de "León" te refieres a la ciudad, a la provincia o al País Leonés?

    En caso de estarte refiriendo al tercero de los conceptos propuestos te rogaría que en lo sucesivo cuando te refieras a este concepto no uses el término "León" sino País Leonés; que es lo suyo. En caso de referirte a alguno de los dos primeros conceptos, sigue empleando ese término, pues entonces serás leoprovincialista, y nuestras guerras son distintas.

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  7. Cierto el mass es mas revindicativo a poco comparado con la ineficaz UPL...Pero el mass es un partido bercianista...por lo tanto inutil y antileones.....PREPAL es el partido que siempre ha sido revindicativo y leones y ademas zamorano ....quién da más??? mi voto para PREPAL...UPL=gemma cabezas chamorro y chao...uffff que vomito

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  8. PREPAL me suena a pintadas en la pared de un silo al lado de la carretera en los años ochenta. No se, me suena a votar UCD o a comprar un video sistema betamax para grabar Dallas o Dinastía. Otra época que ya pasó. Como PREPAL sea el futuro, el último que apague la luz.

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  9. Otro ridículo de la UPL, el parque pocoyó. Y van...

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  10. Monárquicos y católicos, del ciudadano Iglesias Carreño, D. Francisco.
    Sin "olvidar" a los del "Movimiento Leonesista {GRES-CCZZ-GAPL}"

    De chiste, y malo.

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  11. Paraece que Lázaro cobra varios sueldos y no pisa por el trabajo. ¿Le parece bien a Gemma su jefa y a Chamorro su jefe que mientras en León hay decenas de miles de parados se permita que no le dé un palo al agua y cobre diez millones de pesetas? Bueno, teniendo en cuenta lo que hacen ellos. Los leonesistas estamos hartos de los vividores de la política. Mi voto, en blanco.

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