Oro parece, plata no es

Es famosísima la foto en que un grupo de militantes del PSOE leonés salía en una de tantas manifestaciones multitudinarias de los años 80, afirmando que "somos socialistas pero antes leonesistas". Por entonces gobernaba la UCD, y claro, había que llevar la contraria:

Imagen obtenida del blog acerandera llionesa

Prometió el PSOE reconocer muchas cosas a León, reconoció de todo lo habido y más. Y les llegó la oportunidad. Tuvieron un gobierno socialista en Madrid. Tuvieron el primer parlamento de Castilla y León. Tuvieron una oportunidad de oro (quizás "la" oportunidad) y...no solo no hicieron nada sino que desarrollaron un discurso consistente en consolidar la figura, historicidad y legimitidad de la recién inventada comunidad autónoma. Ese discurso es mantenido por todos y cada uno de los líderes visibles del socialismo autonómico, desde Demetrio Madrid hasta Óscar López, pasando por José Constantino Nalda, Juan José Laborda o Ángel Villalba.

Ni uno solo de esos representantes ha hecho un solo gesto en favor del País Leonés. Cuando Pardo propuso el reconocimiento de nuestro territorio como región europea para seguir recibiendo fondos de la UE, tuvimos a un Villalba que dijo no. Lo desvirtuó con la inclusión de Ávila, luego se sumó la prensa -incluida la leonesa- que dijo que en verdad la provincia de León estaba muy cerca de esos niveles de renta y que lo de Pardo era, básicamente, otra declaración del leonesismo radical que representaba el ex concejal.

Y cuando la UPL está más débil y el voto leonesista flota en el ambiente en busca de portavoces que le den voz pública, curiosamente tenemos un PSOE que pide una especificidad para León reivindicando un discuro de "leonesismo" muy particular. Una especificidad extraña, ambigua y de doble discurso. Ibán García del Blanco, ex secretario general de Juventudes Socialistas de León, actual concejal de régimen interior del ayuntamiento de León y miembro muy destacado de la ejecutiva socialistas leonesa, fue durante mucho tiempo una voz supuestamente crítica hasta con su propio partido pues llegó a pedir la autonomía leonesa y no solo de León sino con Zamora y Salamanca. Tal borrachera de leonesismo (dicen las malas lenguas) se la debió a Pardo, de una época en que ambos eran líderes del sector juvenil respectivo y establecieron un pacto promovido por el leonesista: Blanco pediría como secretario de las juventudes un referendum para el conjunto del territorio leonés, contando entonces con el apoyo de los socialistas zamoranos y a la espera de los salmantinos. A cambio Pardo, si llegaba al ayuntamiento y podían establecer un pacto, digamos que movería ficha a favor de un pacto con el PSOE.

Hoy, diciembre de 2010, con tantos cargos, el sr. Blanco ha dicho en varias ocasiones tanto en entrevistas como en declaraciones en radio leonesa que quiere algo así como un León fuerte dentro de la comunidad. Buen recule porque él mismo firmó aquel famoso compromiso en que se creaba una mesa de estudio legal donde se iniciarían los pasos para lograr la autonomía. Con el tiempo siempre sale la verdad de pensamiento. Hoy también, la prensa nos dice que los socialistas presentaron una enmienda en Valladolid para promocionar el leonés en cumplimiento de lo que dice el estatuto. Y la prensa nos dice que el PP lo rechazó.

No es la primera propuesta que hace el PSOE en este sentido, la última la hizo en febrero de este año, logrando entonces un apoyo unánime de todos los grupos parlamentarios. Lo que pasa que una cosa es lo que se dice que se va hacer, otra lo que se hace y otra como se cuenta la feria. De aquellas, como ahora, lo que propuso el PSOE fue un brindis al sol, algo así como reafirmar que existe un artículo que reconoce nuestra lengua, y punto. Todo lo que salió en prensa es exageración pactada. Todo vale en la estrategia de captar votos de sectores culturales, que han solido ser el filón de votos socialistas.

La "nueva" propuesta consistía en verdad en volver a repetir lo mismo pero con un claro fin electoralista para demostrarnos que son más leonesistas que los dos mendrugos ex upelianos. Y el PP les dice básicamente que no. Así la maquinaria de prensa socialista nos vende su particular interpretación de los hechos. Así nos llega que unos son los buenos y los otros malos malísimos. Comedieta entre dos actores que interpretaban el mismo papel.

Ese "leonesismo" que dicen practicar lo pueden practicar ahora mismo: en el ayuntamiento de León, por ejemplo, existe un servicio de traducción a leonés que publicitan en la web. La concejalía de cultura, en manos socialistas, podría hacer alguna actividad en leonés. O deportes, o juventud, o bienestar social, o fiestas...pero nada. Por no hacerlo no lo hace ni UPL que poco a poco, gracias a Chamorro, ha ido diluyendo el leonés en favor del castellano en todas las actividades de cultura leonesa.

Por eso, queridos lectores, si UPL no mueve un dedo por el leonés, el resto no lo va a hacer. El PSOE ha dicho una cosa y ha ejercido otra. Siempre. Y en su supuesto leonesismo, no es más que un canto de sirenas para atraer barcos que creen van a naufragar. Y no, que nadie diga que ya lo sabe o que a nadie engaña, porque este blog estaría en condiciones de dar una lista más bien extensa de gentes que se han dejado encandilar por los cantos de sirena socialistas y cuyos nombres pondrían los pelos de punta.