Manifiéstate, que algo queda. O no.

En el leonesismo social, y ya es la enésima vez que lo decimos aquí, las visiones se están dispersando de tal manera que, si alguna vez hubo un consenso de objetivo final (la autonomía leonesa) este objetivo desde luego que está muy disperso y muy lejos de ser alcanzable solo por la presión de este colectivo. Este blog puede aplaudir unas decisiones, pero también puede criticar otras, porque para desgracia de algunos, este pequeño rincón cibernético tiene sus propios criterios, igualmente compartibles o no. Decimos todo esto por los recientes acontecimientos sucedidos dentro del leonesismo y de la reivindicación social acerca de la situación socioeconómica que vive León. Atención. León, no el País Leonés, la Región Leonesa...no. León, la provincia. Y si se nos apura, la capital de la provincia ¿Comenzamos? Advertimos que esta entrada será del desagrado de bastante gente.

NO SIEMPRE MANIFESTARSE ES LA MEJOR OPCIÓN

De nuevo a alguien se le ha ocurrido que lo que tiene que hacer el leonesismo es salir a manifestarse. ¿Razones? obvias y a montones, cantidades casi infinitas hay para hacerlo. Pero ¿Es lo mejor? En tal planteamiento recordemos que ya en la penúltima manifestación celebrada en Zamora se cuestionó la idoneidad de hacer una manifestación. E insistimos que no fueron los motivos, que todo el mundo comparte, sino el hecho en sí como respuesta a ello, por el coste económico y sobre todo moral que conlleva para la organización.

Así lo estimaron los organizadores, de nuevo el Colectivo de Ciudadanos del Reino de León, que motivos sobraban, como se plasman en las palabras clave a la cabeza del cartel que aquí mostramos. El resultado en cuanto a asistentes, lo previsible. Apenas un centenar de personas, cifra bastante más baja que la anterior manifestación del 9 de mayo de 2016 en donde se alcanzaron los más de 300 asistentes. Aquí, insistir en otro mantra que repetimos en este blog hasta el cansancio: toda manifestación, si no cuenta con el respaldo social y político amplio, y con un mensaje único, se queda en una muestra exterior de la fuerza del movimiento convocante. El resultado, unas 200 personas menos asistiendo al evento. Incluso a pesar de fletar un autobús, ni siquiera se cubrían la mitad de las plazas.

Cabecera de la manifestación del 2016.

Vista casi general de la manifestación del pasado 20 de octubre de 2018.

¿Por qué de este desinfle de asistentes? Ya se conocen de sobra:

1. Convocatoria: se hizo deprisa y sin planificación. La gigantesca mayoría de personas se enteraron apenas 10 días antes (ni siquiera), no permitiendo a muchos asistir por motivos laborales.

2. Convocantes: no se pueden hacer estas cosas de modo unilateral. Guisarlo y comerlo solo no es buena receta ante un plato tan complejo.

3. Agotamiento: recordemos de nuevo la manifestación de Zamora. El agotamiento físico y espiritual que conllevó, hizo que manifestaciones futuras generaran cierta distancia. Y esa lección, perfectamente expuesta en este blog en su entrada correspondiente (ver aquí) no se ha aprendido correctamente.

Con todo, cualquier persona entendería que algo se ha hecho mal, e intentaría no repetir el experimento. Pero para otros, la culpa la tienen fulano y mengano que hicieron campaña en contra (hasta donde sabemos nadie hizo cosa así) y que al final hay que "seguir saliendo a la calle", "que nos vean", "hay que seguir luchando", etc etc etc. Y tuvieron otra oportunidad más.

ESTOS NO SE MANIFIESTARON POR LEON. QUE NO.

A fecha de hoy, no hay ni un solo sindicato que diga claramente que quiere la autonomía leonesa. No, ninguno de los dos sindicatos mayoritarios, UGT o CCOO, ni sus secretarios generales, Xosepe Vega o Enrique Reguero, piden abiertamente la autonomía. El primero, del que ya hemos expuesto con suficiente amplitud su biografía y su falso leonesismo, ha jugado a tantas cartas y con tantas caras, que solo puede engañar a los muy inocentes o a los muy ciegos. El segundo ni siquiera puede alegar un ligero sentimiento leonesista, sino un sentimiento de que algo no va bien en León, el León provincial, el León capitalino. No el León berciano, no el León de la minería...por supuestísimo no el León del campo o el de la montaña porque ni uno ni otro sindicato rascan bola en esos sectores. Sí, hablan con sindicatos agrarios y les convencen de lo que les da la gana, pero su implicación no pasa de ahí.

Han dicho en varias entrevistas que si la comunidad no da encaje a lo leonés, que si no se hacen bien las cosas desde la junta, que se pierde empleo...pero la pregunta clave es ¿Usted, como secretario general de su sindicato, apoya explícitamente la autonomía del País Leonés? El término País Leonés es fundamental. No espere nadie que ni uno ni otro lo utilicen, es contrario a su ideario.

Decían que quieren convocar una gran manifestación por el futuro "de la provincia de León". Se nos ha vendido la historia como que es una protesta por las políticas de la junta, e incluso dejado entrever que la raíz es la falta de autonomía leonesa. FALSO.

Baste leer la entrevista hecha por ambos responsables en ileon.com, para darse cuenta que su intención va mucho más allá y que León importa muy poco en la ya clásica carrera personal y política que emprenden nuestros máximos representantes sociales y políticos que comienzan en lo más bajo y acaban en los despachos madrileños. Tomemos nota de frases que, en una entrevista larga no se conectan bien, pero expuestas de seguido delatan otras intenciones (el siguiente texto une declaraciones de ambos líderes sindicales):

 Hay que pensar en las nueve provincias de la Comunidad, nos gustará más o nos gustará menos, en el desarrolo de las nueve (...)  Una organización sindical no es la clave para todo, ni es la que tiene que solucionarlo todo, tiene que contribuir a las soluciones pero ojalá tuvieramos la solución de todo en nuestras manos (...) Todavía sigue habiendo mucha persecución sindical, mucha dificultad para implantarse en las empresas, sobre todo en las microempresas, las que más abundan en León (...) La vía, tanto UGT y CCOO de León, la tenemos clara. Vivimos en un sistema territorial mal diseñado, que para nada contribuye a la solidaridad interterritorial. (...)  Xosepe Vega (CC.OO.): Hay que poner a León en el mapa y que los leoneses nos hagamos valer, que no demos por supuesto que estamos satisfechos cuando no lo estamos, no es solo por el futuro de León, es un bien por el conjunto de España (...) entendemos que hay que dar el paso y hablar en positivo del sistema territorial. Yo apostaría por un estado federal donde hubiera competencias estatales y una igualdad en ciertos ámbito.

Y si esa entrevista, pasada de puntillas y que casi nadie ha sabido interpretar correctamente, no era suficiente, nos regalan otra gran entrevista en La Crónica donde aclaran que la cosa no es luchar por la economía leonesa sino "por el 15N". Literalmente, así como suena, sin tapujos, un nuevo movimiento a imitación del 15M donde solo se cambia una letra y donde como hemos visto, el cambio no afectaría a León ni a su concepción territorial dentro del marco autonómico, sino a una revisión del estado español. Hecho este corroborado todavía más con una tribuna publicada en ileon donde se mezclan demasiados asuntos inconexos que no son más que batiburrillo de ideas. Ahí es nada.

LA IZQUIERDA, CON LA MANIFESTACIÓN ¿SOSPECHOSO?
Por supuesto, se ha unido Izquierda Unida, partido conocido por todos los leonesistas como el máximo impulsor de la fiesta de Villalar y opositor radical a todo movimiento leonesista. Y por eso se suma Podemos, otro partido que se ha opuesto en sucesivas ocasiones a una hipotética autonomía leonesa alegando el clásico discurso de la izquierda, que todo se limita a un maltrato por parte del gobierno, que es del PP, y que con ellos todo irá mejor ¿O acaso se nos ha olvidado? Refresquemos la memoria:

"Ahora no queremos una Castilla y león por separado sino al contrario, una Castilla y León unida, fuerte, equilibrada entre provincias, desde donde lideremos el cambio y revirtamos 30 años de políticas de la peor casta posible".

Recordemos que ambas formaciones votaron en varias ocasiones contra los planes mineros, que han dicho que hay que dar alternativas sostenibles al carbón, y que no mueven un dedo al comprobar el cierre de las térmicas y que no se plantee ni una sola alternativa laboral al respecto. Pero salen a la calle pidiendo un futuro. Quizás se deba a que hay unas elecciones en 2019 y que hay que sumar votos al precio que sea. La política al final iguala en modos y maneras a todos.

¿Y LOS DEMÁS? CADA UNO A SU ROLLO
A la manifestación se sumaron organizaciones de más o menos calado, algunas de trayectoria desconocida pero que suenan bien en un titular. La prensa, mejor dicho, los organizadores sindicales, contabilizaron nada menos que 40 organizaciones, la gran mayoría de relevancia muy pobre o nula. Por supuesto, cómo no, se sumó UPL. Y para demostrar que es más que nadie, no solo dice que se suma a la protesta, sino que hace suyo todo mensaje de protesta. Y ya. El simplismo elevado a la enésima potencia lidera la ideología del que otrora fue el partido tocacojones a la junta y la única esperanza para decenas de miles de leoneses. Lo hace "incondicionalmente".

Ahora llegamos al clásico momento surrealista de la realidad leonesa ¿Quiénes más sumaron? El PP, sin muchas explicaciones dijo que se sumaba en unas declaraciones donde nada quedaba claro salvo que había un problema y que la junta, cómo no, estaba ahí para solucionarlo, porque todo era "culpa de los vaivenes políticos del gobierno socialista", el cual lleva 5 meses en el poder. Nada de autocrítica tras décadas ininterrumpidas de gobierno popular con sus políticas centralistas y anti leonesas.

Igual algo de razón tienen los del PP, porque el PSOE, curiosamente, se sumó pero en silencio, es decir, sin declaración oficial alguna. Cruda posición tenía, son gobierno en Madrid pero a la vez oposición en Valladolid. Cualquier movimiento, cualquier palabra, cualquier gesto podría pasar una factura muy cara. Recordemos de nuevo: elecciones 2019. Punto.

¿Y quién no se sumó? Ciudadanos. Analizar la ideología de este partido es harto complicado.

Finalmente no podemos obviar a Diario de León, un periódico igual de cómplice de la situación que vivimos los leoneses por sus constantes apoyos a toda política que fuera consolidar el marco autonómico, destruir el leonesismo como fuera y fomentar a todos los partidos que tuvieran esa visión, en función del interés de su dueño, Ulibarri. Hay que tener unos cojones de caballo para que una periodista, Ana Gaitero, salga a leer un manifiesto junto a dos sindicalistas que dicen salir a manifestarse entre otras cosas por la corrupción de la trama Enredadera. Trama de corrupción que ha llevado a la cárcel precisamente al dueño de su periódico, José Luis Ulibarri. Cojonazos de campeonato.

Pero no. Como a todos los demás, el mensaje final no era relevante ¿Qué mejor que posicionarse a favor de algo que se suponía de partida que iba a ser el no va más de las protestas leonesas? Más lectores, más reenvíos, retuiteos, etc. más dinero por publicidad. Diario de León llegó a vender 50.000 ejemplares diarios. Hoy apenas llega a los 3.000 ejemplares, de los cuales casi un tercio son ventas en administraciones públicas diversas.

Así que, como vemos, la suma de fuerzas no es sino una suma de intereses particulares y partidistas muy, pero que muy ajenos, a la defensa de León, ni como provincia ni como identidad. Ni qué decir en lo económico. Cada uno se ha ido arrimando el ascua a su sardina para vender a posteriori un discurso propio ¿Vemos o no vemos el mar de fondo?

EL LEONESISMO SOCIAL, SUMADO PERO DIVIDIDO
El problema, y aquí es donde se nota no solo la división sino también que algo nuevo se está fraguando, es el cuestionamiento por parte del leonesismo social de la idoneidad de la manifestación. A medida que las declaraciones de los líderes sindicales aumentaban en profusión, se apreciaba que la cosa no era como se creía. Lo que parecía venderse como un acusatorio hacia la junta y al estado central basado en la falta de autonomía, fue derivando en un desvele muy lento de las verdaderas intenciones.

Días previos a la manifestación, una rueda de prensa en el Hotel Las Infantas, con la presencia de varios colectivos leonesistas, quiso dar carpetazo a una debate que en verdad tan solo comenzaba y no parará. Los colectivos aducían que la manifestación, para ellos, además de para denunciar la situación leonesa, era para reclamar por lo que luchaban que era la autonomía leonesa. El colectivo CCRL incluso envió una comunicación aclarando que era por el conjunto del Reino de León y no solo de la provincia. La intención, como era evidente, no era hacer seguidismo a las directrices de los sindicatos, sino remarcar que otros leoneses apuestan como solución una autonomía negada precisamente por quienes encabezarán y liderarán la marcha. Aún así las voces que cuestionaban la idoneidad de ser partícipes de la misma fueron ganando adeptos día tras día tras la lectura de las diversas declaraciones de los dirigentes sindicales.

El debate siguió, con más virulencia todavía. Algunos proclives a participar llegaron a acusar de un "complot", descalificando el rechazo por esencialista y búsqueda de purismos en vez de buscar suma de voluntades. Por la otra parte se alegaba que aquí se estaba engañando a la gente, que los mismos que nos han metido en donde estamos quieren ser sus salvaguardas, y que la cuestión autonómica estaba muy lejos del discurso de esa manifestación. Preguntas retóricas, acusaciones, reflexiones innecesarias...una amalgama de ideas flotando en el ambiente que a lo único que condujeron fue a enrarecer un ambiente ya de por sí demasiado cargado. Incluso algunos, y no pocos, llegaron a afirmar con esa dosis de testiculina típica de redes sociales, que si había alguna bandera que pusiera "Castilla y León" se marcharían. Pues...

Quien fuera a la marcha comprobaría claramente que aquello era una manifestación por un futuro mejor pero indefinido en cuanto al modo y manera de hacerlo: desde rechazos a pantanos, pasando por pensiones, mejoras sanitarias, reclamaciones locales, cierres de empresas...cada uno salió por lo que quería o le importaba. Todos aprovecharon la corriente para remolcarse y vender sus mensajes. Y el tema de la autonomía brilló por su ausencia.

El punto a la i lo puso Luis Mariano Santos. Que el actual procurador de UPL en las Cortes de la comunidad ponga un mensaje así, nos dice que el debate ha sido muy pero que muy caliente. No perdamos nota del texto puesto en facebook, merece la pena leerlo varias veces:

Veréis sin ánimo de polémica, no os imagináis como respeto todo lo que cada uno expresáis en relación a la manifestación de ayer, es más seguro q todos tenéis parte de razón en vuestras reflexiones. Pero mirar también quiero deciros, que la de ayer no fue la mejor puesta en escena que yo recuerde, seguro que muchos se aprovecharon, seguro que no todos lo hicieron de corazón.
Y que más da!!!, yo fui porque esta provincia, porque está Región lo necesita y porque no comparto el marco territorial autonómico en el que vivo...Pero por encima de todo, porque quiero seguir viviendo de forma digna aquí, no se si fue un acierto o una equivocación, el tiempo dirá.
Ah y sí, si era contra las políticas de Valladolid y de Madrid, contra los 35 años de autonomía y contra la izqda y contra la derecha, cada uno elige el motivo para echarse a la calle y el mío era ese...

 Bien poco se enteró el procurador de qué iba de verdad la marcha. Como se entere igual de todo, aviados estamos.

¿Y EL RESULTADO? UN FRACASO

Sí, un fracaso. Es un fracaso desde el primer momento en que una sociedad necesita salir a la calle a pedir una solución cuando la clase política conoce el problema perfectamente y son cómplices todos, absolutamente todos los partidos españoles, de la izquierda o de la derecha (en eso damos la razón a Luis Mariano Sanots). El siguiente signo de fracaso de una manifestación es que los asistentes pasen olímpicamente de la lectura del comunicado final, y así sucedió el 15 de noviembre. Cualquiera que se paseara por San Marcos vería que se llegaba a la plaza (algunos incluso la bordearon) y se marchaban a sus casas ¿Qué sentido tiene entonces todo aquello? La respuesta es, como dijimos antes, que cada uno en verdad salió por lo suyo y no porque esos sindicatos lo organizaran.

Las cifras de manifestantes, aunque suenen grandes, son pobrísimas. La manifestación por la autonomía leonesa de 1984 congregó a casi 100.000 personas, uno de cada 6 leoneses de la provincia de León estaba allí. Resultado cero. Marcha Negra en Villablino, 10.000 personas para una comarca de 15.000. Resultado cero. En esta por el futuro de la provincia de León dicen que hubo 15.000 personas (este blog, asistente, puede decir que fueron menos). Resultado muy previsible, y viendo la amalgama de ideologías y dispersión de objetivos, cero. Y recordemos también que en todas, absolutamente en todas, hubo declaraciones, políticos y presencia de organizaciones de todo espectro.

Ante una mezcla tan grande de intereses, opiniones e incluso filias y fobias, cualquier político y estadista sabe que el resultado final es que todo seguirá igual, porque el sindicalista de CC.OO. seguirá saliendo a las protestas con banderas que ponen "Castilla y León", aunque en otros lugares abrace las ideas incluso independentistas. El de UGT hará lo mismo. Y ambos sindicatos dirán que no se hace nada mientras siguen siendo cómplices activos y/o pasivos de las decisiones que se toman desde Valladolid o Madrid. El votante tradicional del PP verá que todo es culpa del PSOE que fue quien ordenó cerrar la minería del carbón, argumento que intenta solo reafirmar su ideología y no ver otras cosas. El del PSOE que el PP es pura corrupción, con igual motivación subyacente que el anterior. Lo mismo podemos decir del resto de formaciones y corrientes ideológicas ¿Cambios? Los clásicos vuelcos electorales pero nada más. En Laciana la Marcha Negra solo valió para introducir al PP en una zona otrora imposible para un partido de derechas. La manifestación por la autonomía leonesa consolidó al entonces AP (predecesor del PP) como fuerza hegemónica leonesa. Tomen cualquier manifestación que quieran y apreciarán similares resultados. No hay ni un solo cambio, solo consolidación de lo existente o como mucho vuelcos electorales entre "guatemala" o "guatepeor".

Y LO DE LA AUTONOMÍA NO SE CONTEMPLÓ NI DE MUY LEJOS
El discurso de la izquierda para el País Leonés es simple: los problemas de los leoneses son solo y exclusivamente fruto del capitalismo, son los mismos males que tiene Asturias aunque es comunidad autónoma propia, o los que tiene Soria, Teruel o el oriente gallego. Y eso es lo que dijeron machaconamente ambos líderes sindicales. Solo que aquí, decir eso en crudo invita a no salir a los colectivos leonesistas. El manifiesto, mejor dicho, los manifiestos leidos en San Marcos dejaban a la luz todas las dejaciones y problemas que tiene la sociedad leonesa. Pero en vez de culpar a unas políticas centralizadoras desde Valladolid y Madrid, la culpa era...del capitalismo. No es nuevo, IU de León lo ha sostenido por décadas, ha acusado al leonesismo de movimiento burgués, de derechona, de todo descalificativo imaginable. Aunque en Cataluña o Euskadi no lo es ¡Qué curioso!

 

Estas palabas no se oyeron tal cual en los manifiestos lanzados allí. Porque es muy crudo, porque queda muy de comunistas, de la extrema izquierda, y eso no convence al conjunto leonés. Repetimos para que quede bien bien claro: TODO, ABSOLUTAMENTE TODO consistía en crear un nuevo concepto de estado, federal, una especie de revolución que nazca en León, donde la identidad leonesa es algo secundario.

 

Si alguien no lo tiene todavía meridianamente claro, Antonio Gamoneda, que leyó uno de los manifiestos, lo explica mucho mejor. Vean y disfruten de sus palabras. En especial a partir del minuto 13:

 

No, no es el pensamiento solo de Gamoneda. Es el pensamiento generalizado de gran parte de la sociedad leonesa, y que se empieza a instaurar en el leonesismo. Las autonomías son un fracaso. Y ese ha sido el gran triunfo propagandístico de la Junta de Castilla y León: hacernos creer a casi todos los leoneses que nuestros problemas no son solo nuestros, que miremos a Soria, a Ávila, a otros lugares, y veamos que también sufren por igual siendo castellanos. A nivel estatal, que miremos a Asturias, a Lugo, a Teruel, a Extremadura...¿Y de verdad está cuajando este discurso? ¿Pero tan corta de vistas es la sociedad leonesa? Parece que sí. Ciega completa. Preguntemos a un lucense si quiere que desaparezca la comunidad gallega y ser gobernados desde Madrid. Preguntemos a un asturiano, a un extremeño ¿A que la respuesta es no?
 
¿Y EL DEBATE LEONESISTA?

Hemos señalado muchas veces que existe un división del leonesismo, si bien esa división ya no es por personas o corrientes, sino por algo mucho más importante. No es visible en perfil alguno, ni siquiera en conversaciones cortas con los implicados; se intuye pero no se ve. El verdadero debate se está fraguando casi todos los días con detalles mínimos.

Fijémonos de nuevo en la foto donde los colectivos leonesistas mostraban su apoyo a la manifestación ¿Vemos los carteles amarillos? ¿Cómo justificar que la cosa es por el futuro del País Leonés cuando incluso en la propia rueda de prensa leonesista se muestran en la mesa los carteles de los sindicatos defendiendo el futuro provincial? Esta pregunta se empezaron a formular muchos, incluso alguna organización allí sentada que aclaró que era por todo el Reino de León. Pero se antepuso el hecho de salir  a manifestarse para ganar visibilidad que centrarse en esos detalles simbólicos e ideológicos. Es más, la contrarréplica fue la clásica alusión a "purismos", "esencialismos"...No deja de ser gracioso, muy hipócrita y tremendamente significativo que en 2014, cuando UPL organizó una manifestación para conmemorar la de 1984, todos los leonesistas dijeron que acudían pero que se mostraban disconformes con la trayectoria de UPL hasta la fecha. Tal disconformidad se mostró incluso en la propia manifestación donde muchos desfilaron por grupillos de afines y amigos ¿Lo recordamos? Revisen la entrada sobre el tema. Todo el mundo tiene sus "purismos" y sus "esencialismos":

La división de peso dentro del seno del leonesismo social, es de algo tan importante como clave para entender el presente y en especial su futuro: el marco territorial. Decir que Zamora o Salamanca son provincias del País Leonés es para algunos (cada vez más numerosos) un grandísimo esfuerzo intelectual, casi imposible. En mensajes donde se mezcla lo ideológico con lo genérico y lo muy personal, se dice que la movilización leonesista se capitaliza en León pero es insignificante en las demás provincias, que no se aprecian gentes ni movimientos, ni siquiera colectivos. Que los pocos que hay son de "gentes de León" (sic), e incluso se desarrolla un discurso identitario uniendo hechos históricos como un Real Adelantamiento con otros de repartos geográficos de Javier de Burgos junto a toda suerte de parafernalias dialécticas que, convenientemente mezcladas, igual hasta cuadran.

Comienza a cundir el pensamiento de que para lograr la autonomía hay que centrarse solo en la provincia de León. El desánimo asistido en las últimas manifestaciones celebradas en Benavente, Zamora y Salamanca ha imprimido la sensación de que por allí no hay nada que rascar. Se plantea un pacto a la irlandesa, donde se renuncia a una parte sustancial del territorio a cambio de la independencia. Quienes conozcan la historia o tengan interés en ella, sabrán cómo sucedió y por qué, y también sus consecuencias.

EPÍLOGO
Advertíamos que esta entrada iba a levnatar muchas ampollas y herir un montón de susceptibilidades. Los hechos son así. Estamos completamente convencidos de que hubo quien lo hizo por bien, otros por puro seguidismo y otros con un peso ideológico mayor que el leonesismo que les "obligó" a ir. Por eso hubo quien abrazó incondicionalmente la manifestación, otros pusieron sus peros y otros directamente la rechazaron. Porque, y siguiendo el símil de la isla, para unos es renunciable Irlanda del Norte, para otros es negociable y para otros es parte integradora e innegociable de Irlanda. Buceando en el fondo esa es la clave de todo. Entenderlo o no es algo a resolver por cada uno.

Un leonesismo muy enredado

El verano es siempre una estación meterológica que genera ociosidad, mucho tiempo libre. Este verano, quitando dos anécdotas finales que veremos, ha sido más bien diferente: por fortuna ha caído un dios terrenal. Sí, dios, así lo llamaban casi todos los que le conocían y en particular sus súdbitos. José Luis Ulibarri Cormenzana. Tildarlo de empresario es exagerado. Llamémosle mafioso, capo, cacique, chantajista, extorsionador... Todos esos son más exactos, pues sus empresas eran su instrumento, no su fuente de ingresos. Pero además, la inmundicia que envuelve todo lo que toca y ejecuta el hijo del taxista, ha salpicado y muy fuertemente al leonesismo.

Como decía Jack el Destripador, vayamos por partes.

LA TRAMA ENREDADERA Y EL ESTERCOLERO MEDIÁTICO
La política leonesa se halla enfangada en toda una trama de corrupción donde el centro gravitacional es un constructor, ex socio de otro constructor muy corrupto, llamado José Luis Ulibarri Cormenzana. Su imperio económico forjado a base de golpe de ladrillo e inversiones en medios de comunicación le han permitido chantajear y manipular toda clase de contratos públicos, verdadera fuente de ingresos. Y es que pocos recordarán ya esos años en que la fallecida Isabel Carrasco era chantajeada por un Diario de León y una Televisión de Castilla y León porque no aceptaba conceder a dedazo el contrato de servicios sociales de la Diputación de León al grupo de Ulibarri (Aralia) y sí al de Carflor, propiedad de una militante del PP llamada Nuria Lesmes. Día sí y otro también protagonizó portadas donde Carrasco era un ser cuasi villano, pésima gestora y generando solo problemas. La situación cambió radicalmente, incluyendo un reportaje personalizado en la "tele castellanoleonesa" (que pagamos todos vía subvención) cuando el contrato fue finalmente a la empresa de Ulibarri.

Ulibarri no es el único salpicado con el estiércol de la corrupción: el clan Lesmes, propietario de La Crónica de León amén de otras empresas también de servicios sociales (ser viejo es rentable para los nuevos tiburones financieros), tiene y mucho que contar, o mejor dicho, ocultar. Por ello el rotativo de Ulibarri y el rotativo de Lesmes se dedican mutuamente a sacar noticias con titulares sesgados y tendenciosos a ver quién salpica más al otro. De momento, gana el Clan Lesmes, pues José Luis Ulibarri está ahora mismo en la cárcel por la trama Enredadera. Aunque nos tememos que esa "victoria", pírrica, dure poco habida cuenta que no están como para asomar la pata afuera, que tanto monta monta tanto. Sorprende que estando como está entrampado en varios casos de corrupción, en unos como sospechoso y en otros directamente como imputado (casos Gürtel o Púnica p.ej.) sea en este cuando por fin lo veamos entre rejas.

Su encarcelamiento planteará cosas muy sorprendentes a medio plazo: el primero de todos que Ulibarri deberá vender sí o sí los activos de sus empresas, porque tengamos todos por seguro que se le impondrá una sanción muy elevada. Dos medios de comunicación caerán seguro: el primero será Radio Televisión de Castilla y León, un ente privado en quiebra técnica que hace las mismas funciones que las radiotelevisiones públicas de otras comunidades, solo que en este caso cubierto con grandes dosis de subvención pública vía publicidad institucional y vía también inyección pública directa con subterfugios. Se estima que desde el año 2010 esa televisión ha recibido la friolera de 130 millones de euros de la junta, cifra que podría ser aún mayor si valoramos igualmente la publicidad institucional tanto de la propia junta como de todas sus fundaciones y direcciones territoriales. su futuro es incierto dado que se compone de un nutrido grupo de inversores que ya están empezando a mover ficha para que Ulibarri venda acciones o su peso en el accionarido quede a lo mínimo.

Otro activo que entrará en el mercado para comprarlo será Diario de León, herramienta de chantaje puro y duro explotado gracias a su amplio prestigio y popularidad fruto de una larga trayectoria como medio y presencia en formato papel en todo establecimiento hostelero e instituciones públicas.

El cambio de manos de dichas empresas, que casi con total seguridad se repartirán entre diferentes dueños, promoverá un cambio en los medios de comunicación no solo leoneses sino en general de toda la comunidad. La junta, o más bien el PP, deberán analizar muy seriamente el caso si no quieren perder la influencia mediática que con tanto esfuerzo económico a costa de todos nosotros han logrado obtener. Y tengamos todos por seguro que influirán y mucho en el voto electoral.

EL PAL, ENFANGADO  Y AHOGÁNDOSE
Que un partido de mínimos como es el PAL, se haya visto enfangado con sus dos concejales más representativos, es muy preocupante. Tanto Pablo González, nombre real de Peyuca, como Francisco Gómez, están siendo investigados por tramas de corrupción. Y ojo, no porque indirectamente les afecte sino por ser actores de primera mano en la toma de decisiones de actos considerados delictivos. La traca final, aunque tampoco es nueva la situación, es una conversación del expediente judicial donde Peyuca confiesa con su alcalde que se paga una buena cantidad de dinero en publicidad (y a saber en qué más) a El Diario de Astorga para que no hablen mal ni de él ni del equipo de gobierno.

El PAL ha tomado la decisión de no hacer nada contra sus concejales mientras no haya pruebas de su implicación, decisión que a los dos primeros días podría parecer razonable pero a medida que pasan los días es insostenible. El daño para sus siglas y para sus concejales es irreparable, PAL, y sobre todo Peyuca y Francisco Gómez, tendrán olor a corrupción en sus papeletas electorales si es que su partido quisiera seguir contando con ellos para el 2019, cosa que o hacen o desaparecen del mapa.

LOS POSIBLES CAMBIOS (O NO) POLÍTICOS
Los implicados bien niegan su participación en los hechos denunciados o bien guardan silencio. El PSOE y el PP ya han dicho a algunos de los implicados que retiren su acta de concejal y que serán expulsados del partido. La decisión, más bien tomada como gesto de escaparate que como consecuencia de algo formalmente probado, tengamos por seguro que tendrá implicaciones a corto y medio plazo. De entrada, el alcalde popular de Astorga abandona el PP y permanece como independiente. El apoyo del PAL es incuestionable, dado que está tan metido en el ajo como el alcalde (vuelvan a leer la grabación anterior).

En San Andrés la cosa, por ahora, ha sido algo más relajada, a Gancedo no se le ha pedido nada, ha salido del juzgado con su abogado y está a la espera de lo que suceda, pero será inevitable que durante la próxima campaña del 2019 el tema flote o que la cosa ni siga generando peores consecuencias judiciales. Por ahora sabemos que sufrió un montón de chantajes vía Ulibarri y que al final con "algo"tuvo que tragar. No es excusa pero sí víctima de un poder mediático que debería servir de reflexión a la sociedad leonesa.

La traca final es el ayuntamiento de León, que es por suerte o desgracia el mayor reflejo de la provincia leonesa:

La dimisión de José María López de Benito, Yiyo (en la foto anterior, el de la izquierda), por imposición de Cs a cambio de no apoyar una moción de censura, esconde muchas otras cosas. Quien conozca la trayectoria de Yiyo sabrá que ha hecho y deshecho cuando ha tenido ocasión, lo que le ha venido en gana en el consistorio. Que se le relegó hace algunos años a posiciones últimas precisamente como castigo a sus desmanes y enfrentamientos con compañeros de partido. Que todavía flota en el aire los contratos de algunos familiares suyos trabajadores del ayuntamiento y cuya ubicación laboral es "rara". Que Cs, partido que nace realmente de muchos rebotados del PP, se conforma en León de una nutrida tropa de ex militantes populares que se la tienen jurada a Yiyo entre otros cargos. Todo esto, y no Enredadera, es lo que se esconde tras la petición de dimisión del abogado. La otra pieza clave es Fernando Salguero (foto, el de la derecha) también entrampado en la trama. Su posición no es dominante en el PP, pero sí vinculada estrechamente a Silván, que hay quienes le consideran uno de sus hombre fuerte dentro del consistorio. Los contratos en temas de radares pasan por sus manos sí o sí, así que tan culpable o implicado está como Yiyo. Al tiempo.

Ahora bien, puede suceder algo que no sería la primera que vez en tierras cazurras: que la corrupción estuviera tan generalizada que al final la gente pasara olímpicamente del tema (caso p.ej. de Marcos Martínez, alcalde de Cuadros imputado en la Púnica). Analicemos: no hay un solo partido con poder que se libre del tema. Los que, por ahora, aparentan limpieza es porque no tocan poder (UPL, Podemos, IU). Pero ninguno de los tres está precisamente en sus mejores momentos. Podemos sufre una erosión global por la inconsistencia y falta de imagen práctica. IU a día de hoy ni siquiera se sabe si seguirá existiendo como partido en 2019. Y UPL... Por lo tanto, puede suceder que, simplemente, la gente "pase del tema", se generalice la abstención en voto y al final sigamos más o menos en las mismas ¿Apuestas?

UN "SALTIMBANQUI" Y UN PACTO EN EL AIRE

Ya advertíamos en diversas entradas de este blog que Matías Llorente estaba bastante disconforme dentro de UPL. A los pocos días de anunciar el pacto y empezar a trabajar con los leonesistas, nos dicen nuestras fuentes que la cara de pasmo no se le borraba de la cara, por la anarquía y falta de planificación que reinaba en la sede de República Argentina. A tal enfado llegó que incluso se planteó seriamente mandar a la mierda el acuerdo y volver al PSOE. Y por lo que parece, la cosa todavía sigue flotando en el aire, manteniendo contactos fluidos con su ex partido en el que realmente jamás militó.

Nada menos que una mesa en un restaurante sentó a Zapatero, Cedón (actual secretario del PSOE leonés) y Llorente. Oficialmente, y siempre según la versión de Llorente, aquello fue más bien una comida distendida casi entre amigos, y que de aquella se le planteó volver porque "es tu sitio". Llorente dice que lo rechazó. Pero claro, añadió la coletilla de "todavía queda mucho para las elecciones", frase que ya nos adelantaba que la ambición del lider sindicalista y eterno político está negociando a todas las bandas posibles y no solo entre UPL y PSOE.  Ahora él se se reafirma en seguir trabajando independiente por León, "algo que solo garantiza UPL". La realidad es otra: nuestras fuentes nos dicen que en la charla mantenida con Cedón expuso la condición de seguir siendo diputado provincial e incluso insinuando ser portavoz de grupo, y eso el PSOE no se lo garantizó aunque tampoco se lo negó. Ante este hecho y la total libertad que tiene para hacer y deshacer con UPL (además de no trabajar nada por el leonesismo) ¿Ustedes con quién se quedarían? Ahí la clave, que a Llorente no le queda otra oferta mejor.

Es inevitable mirar a UPL y preguntarse qué implicaciones puede tener a medio y largo plazo para el partido. Lo primero es ver si el pacto con el PAL sigue adelante, pues por mucho que aseguren que todo va bien, no es así. Que un partido de 7 concejales tenga a 2 implicados hasta las trancas en un caso de corrupción tan gravísimo no es fácil de ocultar. Ni siquiera un cambio de siglas impediría tal hecho.

Pero la cosa hace que se más compleja todavía: Peyuca, único sustento real de votos en Astorga, queda en una situación tan delicada que de retirarse de la política por culpa de este asunto, el voto leonesista desaparecería por completo de la capital astorgana. Lo mismo cabe decir de Francisco Gómez, el otro concejal del PAL en San Andrés. Aquí no cabe el trasvase de votos por ideología, el votante del PAL no es leonesista, se vota a la persona, no al partido. Añadamos otro elemento más como es el futuro diputado provincial: es evidente el grave desgaste de Matías Llorente, ni por asomo repetirá resultados de 2015. Volvamos a añadir que si no fructifica el pacto con el PAL por culpa del caso Enredadera, los votos que podían aportar estos al diputado se diluyen más. Y aunque el voto en San Andrés para UPL se consolida y podría incluso incrementarse para la próxima legislatura, no sería suficiente. El toque final será la inercia de votos, que con menos cargos públicos y menos listas implicará el no voto para autonómicas. El escenario final para el partido judicial de León serían dos concejales en San Andrés y algunos concejales perdidos que apenas suman al cómputo general. Y el procurador, porque solo habrá uno, saldría con un número de votos muy ajustado.

¿Y VILLAQUILAMBRE?
El que fuera en otros tiempos el gran reservorio de votos leonesistas, es actualmente un feudo muy pero que muy personal de Lázaro García Bayón. El informático asombroso es concejal de Hacienda en virtud del pacto con el PP. Resulta que también está entrampado el actual alcalde popular en la trama de corrupción. Bayón se inclina por mantenerse en terreno intermedio mientras los demás partidos toman las riendas de la denuncia y el escarnio público. Y volvemos a la misma, pues quien hable y contacte con gentes del municipio, se dará cuenta del hartazgo y cansancio que produce un político que ya no aporta nada y cuya imagen, muy devaluada, se está viendo seriamente tocada por no salirse del equipo de gobierno a sabidas cuentas de que Miguel García, su alcalde y quien le colocó a dedo como concejal de hacienda, está metido hasta el fondo en la trama de corrupción.

Los burdos movimientos de ajedrez de Bayón son estériles, la oposición, y especialmente el PSOE, va a sacar un gran rendimiento a toda la trama de corrupción, y eso que su propio partido está tan empantado en ello como el PP o el PAL. Y Bayón, en su particular torre de marfil, comienza a echar cuentas, y valorar si seguir con el postureo de "me salgo porque sois todos malotes" o "me quedo que a fin de cuentas eso que saco pal bolso". Dará igual, el cambio político será inevitable. Si Bayón consigue salir en solitario como concejal, si es que se presenta de nuevo, será un milagro.

PARÁLISIS DE UPL
Tibieza y avance en función de titulares de prensa y no de una estrategia planificada, es la actitud de los leonesistas. En un primer momento UPL salió a la palestra no para condenar esta trama de corrupción y sus implicados, sino para defender la vigencia del pacto con el PAL, entendiéndose por extensión que sus implicados participarán en el mismo. A medida que los hechos se hacen más públicos y aparecen transcripciones de grabaciones judiciales, UPL ha optado por marcar una pequeña, mínima más bien, distancia con el PAL pidiendo depurar responsabilidades.Aún así, el silencio marca la tónica general del partido.

Ni siquiera en el caso de Silván, actual alcalde de León, con quien pudieron cebarse a gusto y hasta el hartazgo, y no solo con este caso. El silencio, y no por ocultación de los medios como ha sucedido en otras ocasiones, ha sido el planteamiento. ¿Motivo? Respuesta muy fácil: vacaciones. Unicamente cuando la bola de nieve se está convirtiendo en un alud, Sendino decía que "igual" se planteaban apoyar una moción de censura, para luego decir que no iban a participar en comisión de investigación alguna "pasteleada" entre PP y Cs. Intervenciones todas dichas a posteriori de los movimientos políticos de los demás. Porque quien de verdad está teniendo peso y capacidad de decisión, para bien o para mal, es Cs. Ni siquiera el PSOE, que planteó dicha moción y luego lo retiró porque José Antonio Díez "no se veía como alcalde". Pasmante.

El pacto con el PAL, es obvio, hacía aguas con el caso Enredadera o sin él, pero al añadir este explosivo ¿Realmente merece la pena seguir? Pues este blog está en condiciones más que ciertas de asegurar que en el momento de publicar estas líneas, la dirección del partido prefiere seguir con él a romperlo, aún a sabiendas del coste en imagen que pueda tener ¿Se imaginan esto en otra formación? A tal grado de desesperación por mantener votos han llegado. La respuesta definitiva a todo esto lo tendremos a medida que los acontecimientos se aclaren, porque todo se está improvisando a marchas forzadas.

Y EL LEONESISMO SOCIAL TAMBIÉN "ENREDADO"
Más exactamente una parte del mismo. El leonesismo social camina entre dos rutas opuestas y antitéticas. Y cada vez más. Por un lado tenemos a un leonesismo activo cultural y políticamente que hace cosas, con más o menos éxito o más o menos acierto, pero hace, que es lo importante. Hablamos de colectivos como Ciudadanos del Reino de León y La Parva. Los primeros, algo veteranos ya en esto, han dado un pequeño giro político al colaborar estrechamente no solo con UPL sino con Compromís, más exactamente con su senador Carles Mulet, trasladándoles reivindicaciones políticas que de otro modo podrían caer en silencios mediáticos. Por la parte de la organización La Parva, entidad más reciente, está demostrando tener una capacidad de trabajo frenética: cualquiera que visite su página en redes sociales se dará cuenta que es raro el mes en que no hagan una actividad del tipo que sea, relacionado siempre con el leonesismo cultural, hecho este último que se agradece a la vista del erial y hasta política de tierra quemada que se empieza a practicar desde otras voces.

El leonesismo, y es innegable que desde la desaparición de Pardo y su entorno socio político se ha agudizado notablemente, ha perdido por completo sus referentes y el rumbo, agarrándose a cualquier cosa que pase por delante.

Aunque su celebración no es nueva, sí que este año es la segunda vez al que asisten leoneses a celebrar el aniversario del Consejo Soberano de Asturias y León. Se quiere ofrecer como una especie de "independencia", eso sí, compartida entre leoneses y asturianos. La cosa tiene su gracia, pues disponiendo los leoneses una historia tan grandiosa como reino y pueblo soberano (ni este término se entiende en el leonesismo ni en la sociedad leonesa en general), es hasta humillante acudir a un monte, leonés para más coña, a celebrar una ¿independencia? junto a asturianos, colectivo que fue súdbito leonés, y menos aún en las circunstancias sociales e históricas del momento. Partamos primero en ver qué era eso del Consejo Soberano con este mapa de wikipedia:

¿Ven la zona coloreada? El Consejo Soberano de Asturias y León tenía "poder" en la zona coloreada de Asturias y la provincia leonesa. Ni siquiera en todo lo coloreado, pero vamos a decir que sí. Como se aprecia, la mitad de Asturias no era de su dominio, pero es que la parte leonesa era ridícula. La duración fue casi de un par de meses, y solo tiene cierta relevancia en el mundo de la numismática por sus monedas y billetes emitidos. Incluso en la cuestión de las monedas, merece que apreciemos el detalle que nos cuentan en esta página especializada en numismática: en ella se explica que casi todos los billetes emitidos eran "dibujos con motivos asturianos sobre minería, pesca, campo y ciudad, que el autor de los dibujos es el artista de Gijón Germán Horacio", algo que es lógico teniendo en cuenta que lo leonés en esto pintaba nada. Comparémoslo entonces un mapa del Reino de León de la época de Alfonso VI, rey del que no hay ni un solo recuerdo monumental en todo el Reino de León:

Si todo eso no es suficiente prueba de que celebrar un leonesista (o un leonés) tal experimento político es un menosprecio hacia su tierra, queda como prueba final el comunicado allí leido por Andecha Astur, partido nacionalista asturiano, y organizador de estos eventos (nótese que ni siquiera se apuntan otros colectivos asturianistas). Merece la pena resaltar frases como estas (el subrayado es de este blog):

Na intervención política celebrada nel llugar reivindicóse esta institución "como la única que representa Asturies, darréu que l'estatutu d'autonomía que carecemos, y la propia denominación de 'Principado' pa la nuesa nación, foi impuesta dende Madrid, ensin que los asturianos, a diferencia d'andaluces, gallegos, vascos, catalanes..., pudiéremos pronunciamos democráticamente sobre la mesma", y denunciando como la falsa "la transición política cola que continuó’l franquismu que non solo nun permitió recuperar esta auténtica institución d'autogobiernu, sinón qu'impuxo un 'Principado' y un Estatutu descontestualizáu hestóricamente y sociolóxicamente ayenu a la sociedá asturiana, que nun supón más qu'una curtia descentralización alministrativa, condergándomos asina a la situación de colonialismu que carecemos anguañu", recuerda la organización nacionalista nun comunicáu.

El hecho, como mucho, quedaría en el anecdotario si no fuera porque UPL, que tanto quiere remarcarse como partido leonesista y preocupado por lo leonés, decide que apoya la concentración organizada por el partido nacionalista asturiano: "la UPL celebra esta efeméride que es un símbolo más de que el Reino de León es una entidad política que permanece en nuestra Historia. Una Historia que puede dar ejemplos de saber compartir y convivir con otros pueblos en España. Un ejemplo más de la tradición que impulsa a nuestro partido a reclamar la libertad y el autogobierno del que siempre gozó nuestra región; y un estímulo para construir una Región Leonesa más próspera y solidaria, donde los ciudadanos puedan hacer realidad sus sueños y ambiciones". Es decir, que no se enteran de nada, ni de lo que fue el Consejo Soberano ni lo que era el Reino de León, lo que implicó cada uno y, lo que es peor, hacen la ola a un movimiento independentista asturiano que tradicionalmente ha abogado por reclamar el norte de la provincia de León como territorio propio.

La causa de este apoyo hemos de encontrarlo en el contacto, vía internet y redes sociales por desgracia, con gentes que consideran que lo leonés camina de la mano con lo asturiano, no necesariamente igual, pero sí de la mano. Es más, consideran que esa seudo república fue un símbolo de resistencia contra el franquismo y el fascismo y en favor de las libertades. Quizás ignoren que el 24 de abril se hace un homenaje a los héroes leoneses, a aquellos que lucharon por nuestras libertades. Por eso, si a eso sumamos la paupérrima formación cultural en cuanto a identidad leonesa y la necesidad que tiene UPL de hacer amigos o repescarlos, el resultado es esto.

NOTA FINAL:
Hablando de "fascismo", aquí la enésima gracieta de un tal Enrique Barthe, personaje muy conocido en internet y particularmente en facebook y twitter, por su extrema hostilidad hacia lo leonés y el leonesismo, a lo que añadir toda clase de lindezas a cientos de personas con el soberbio motivo de suponerse superior intelectualmente. Esta vez ha cruzado una línea roja que al menos supondrá un punto y aparte en su trayectoria como desequilibrado mental. Nada menos que este montaje:

El mensaje fue borrado, pero ya ha sido visto por decenas de miles de personas. La "disculpa", tras el enfado desde la dirección de UPL, se plasma así, como una gracieta:

Y no se sorprendan si decimos que además cuenta con el aplauso de cientos, miles de leoneses, que ríen chistes tan ingeniosos como este. Por cierto, la mayoría con perfiles de extrema izquierda y extrema derecha, porque al final la diferencia en objetivos entre fascismo y comunismo es nula. UPL dice que va a presentar denuncia judicial. Más exactamente que tomará todas las medidas que sean oportunas, una forma laxa de decir que poco se puede hacer si no suena la flauta en los tribunales. El verano, freidero de neuronas y ejecutor de calentamientos hormonales que afectan a las capacidades intelectuales, ha vuelto a hacer de las suyas vía facebook, vía leonés emigrado frustrado, vía leonesismo como objetivo ¿Se entiende con esto la necesidad que hay de hacer pedagogía del leonesismo? Y no solo dentro de los que se dicen leonesistas.

Una semana para recordar

Entre los días 22 al 27 de abril se sucedieron una serie de hechos vinculados al leonesismo que merecen un análisis muy pormenorizado, y en otros simplemente a lamentarse. En esta ideología se pueden tener diferencias, se puede tener una visión u otra, se puede apostar por unos hechos u otros, pero el común denominador debería ser alcanzar un autogobierno leonés. Las cosas sucedieron más o menos así.

LA INCONGRUENTE RESISTENCIA

Con un cartel bien diseñado, con un planigrama más que aceptable y que cualquiera admitiría como óptimo, se nos presenta un acto de protesta contra la comunidad. O así lo entendió todo el mundo. El acto estaba organizado por cuatro entidades de izquierdas leonesistas: Xuntanza, Agora País Llionés, Ruchar y Mocedá en Pie. El precalentamiento de internet con decenas de comparticiones, comentarios, retweets y "me gusta", inundaron la red. La acogida de la prensa tampoco fue fría, ni siquiera en el día del acto, con vídeo y galería de fotos incluida en varios medios digitales.

El resultado fue 25 personas concentradas en la Plaza del Grano. Cifra de asistentes que contrasta muy considerablemente con los que hubo por ejemplo en la presentación de Xuntanza, con un salón casi lleno. Por faltar, hasta faltaron portavoces y algunas caras muy visibles que tanto cacarean su pertenencia a la organización a modo de purga identitaria frente a militancias pasadas. Lo mismo se puede decir de Agora País Llionés, donde la ausencia de uno de sus máximos representantes, y no por motivos laborales, fue bastante significativa.

Hablamos de colectivos y simpatizantes que arengan en todas partes con la movilización, con pisar la calle, con salir a protestar, con "disfrutar de lo votado". Ya acostumbrados a que los actos de protesta leonesista cuentan con asistencia de mínimos, que hubiera poca gente hasta sería lo de menos aparte de la hipocresía y demagogia de los antes aludidos. Hay algo que ha indignado, y hablamos no solo por boca de este blog sino de muchas más gentes leonesistas (muchas son muchas): una persona, que además se aprecia perfectamente quién es, decide coger una bandera de la comunidad y quemarla, algo que por otra parte se ha hecho hasta el cansancio en otras tantas manifestaciones ¿Y cuál es la respuesta de las organizaciones?

Unas entidades que no dudan mostrarse como la alternativa contra el españolismo, el castellanismo y reclaman un espacio nacionalista para lo leonés, califican de "acto despreciable" quemar una bandera de algo contra lo que luchan. Es bueno recordar una protesta, con el mismo motivo y más o menos mismas fechas pero hace unos cuantos años, cuando a la junta se le ocurrió celebrar un acto del día de los Comuneros en el Hostal de San Marcos. En el blog de Máximo Soto se dejan unas cuantas fotos al respecto. Vale la pena contemplar cómo se prendió fuego a una efigie de Juan José Lucas, se quemaron varias banderas de la comunidad, mientras se expulsaba de la sala a los representantes de UPL por silbar e increpar a los asistentes. Nadie pidió perdón por defender sus ideas, ni en ese momento ni más tarde.

A MADRID SIN COMPAÑEROS DE VIAJE

Xuníos por un Reino convocó una manifestación el 23 de abril a las puertas del Congreso en Madrid. La convocatoria contó con el apoyo de la Casa de León en Madrid y de UPL. Curiosamente no contó con el respaldo de ningún otro colectivo leonesista. El resultado se antojaba pobre en cuanto a asistentes incluso antes de su concentración. ¿Razones del no respaldo? Aunque se pidió colaboración, no gustaron los modos y maneras, tildados por algunos como bastante soberbios. Una de nuestras fuentes afirmaba lo siguiente: "repartieron varios mensajes por grupos de facebook, whatsapp...incluso mandaron un audio pidiendo que o participes o que te apartes, en un tono como si sobrara la gente. A mí desde luego que me creó un poco de rechazo".

Con todo, la cosa quedó relativamente bien lucida, cartel muy grande y visible, correctamente diseñado, incluso con mensajes de actualidad (léase la reclamación de la Ruta de la Plata), logrando la oportuna foto que se agradece. La presencia final de leonesistas se limitó a los militantes de ese colectivo (no todos), a algunos residentes en Madrid, y a la participación de directivos de UPL (uno) y del PREPAL. 

De nuevo recalcamos el que "no todos" estuvieron presentes cuando en redes sociales algunos de esos ausentes son los más insistentes a la hora de no solo vender las acciones de su organización, sino también de machacar a los demás. La comodidad que supone compartir y vender comentarios para mostrarse como muy activo, contrasta escandalosamente con la realidad. Es hora de decir adiós al activisimo de botón.

24 DE ABRIL, SIN NOVEDAD

Se celebró otra vez el Día de los Héroes Leoneses. Nada que decir al respecto dado que fue casi lo mismo que otros años, incluso el número de asistentes. Es de agradecer que cargos de UPL acudieran a este acto y al anterior, aunque no en el volumen deseable en proporción respecto de los existentes. Lo mismo hay que decir del PREPAL, partido con el que se puede discrepar en muchas cosas, pero no en su implicación en la práctica totalidad de actos.

Como en los otros, la ausencia (salvo dos casos muy personales y muy a título particular) de otros colectivos leonesistas anteriores, denotó por enésima vez que el leonesismo camina disgregado y sin puntos de encuentro claros, permaneciendo en burbujas personales y tangenciales a todos y a todo.

LOS COMITÉS LOCALES DEL GUADIANA
Como si fueran los Ojos del Guadiana que aparecen y desaparecen misteriosamente, en UPL los comités locales ya no surgen porque haya muchos afiliados en un lugar sino porque interesa a la dirección de turno sumar votos en las comisiones para garantizar que saldrán todas sus propuestas. Luego, se desarrollan y siguen la línea impuesta por la dirección o bien se destruyen. Y cuando no, son una pantalla sobre la que vender a prensa que hay una actividad frenética del partido y que cuenta con un montón de apoyos. En esto último se han basado para crear, de nuevo, el comité local de Villaquilambre. Decimos de nuevo porque ese comité existió, se "medio desarrolló" y posteriormente por un acuerdo de aquellas entre Joaquín Otero y Lázaro García Bayón, desapareció sin dejar rastro ¿Por qué anunciarlo ahora?

Se perderá el diputado provincial porque no habrá ni votos desde Villaquilambre ni votos desde León (municipio donde solo se agarran a la esperanza del pacto con el PAL), con lo cual uno de los pocos rescoldos económicos que les queda se perderá de modo irreversible. Y basta con ver la foto para darse cuenta del asunto: diez personas de las cuales tres son en representación de la dirección upeliana. Muy lejos quedan aquellas míticas cenas en el restaurante El Pozo donde se llenaba una sala entera en cenas de navidad del comité local. Lázaro ni siquiera se presenta como secretario, cede su puesto a su número dos. Sigue pensándose muy seriamente seguir en el tema, si le compensa o no, aunque en verdad la decisión ya la tiene. Ni siquiera podrá ser diputado provincial si es que se consigue mantener esa representación, porque todos sabemos que ese cargo se reserva para otra joya, Matías Llorente ¿Seguirá en UPL? No descarten nada.
 

NI IDEAS NI INICIATIVAS
Para dirigir un partido de supuesta gran carga ideológica como es la Unión del Pueblo Leonés, su cúpula directiva tendría que tener un sentimiento leonesista claro y definido, así como unos objetivos a alcanzar perfectamente estructurados. Es obvio que ni la actual ni las precedentes lo tuvieron jamás. Una prueba tonta pero simbólica es la banda municipal que fue impuesta por Juan Morano Masa como símbolo para los concejales municipales del ayuntamiento de León allá por los años 80.

Aquí vemos a Eduardo López Sendino, concejal por UPL y vicesecretario general del mismo (ante su secretario general) que luce una banda de nuevo cuño con el escudo del municipio y el color de la bandera leonesa. Era algo esperable y reclamado por décadas, pero en UPL, volvemos a recordar, quienes lo proponían fueron expulsados. El día de las Cabezadas dos miembros de Xuníos por un Reino le entregan dicha banda. Él se la pone y ya está liada: titular de prensa es que "UPL rompe con el protocolo", o la más graciosa de "la UPL propone que la banda de los concejales lleve el color de la bandera de León". Es decir, ha sido necesario que dos personas entreguen a un concejal una banda elaborada por ellos mismos para que se acuerden de ello. Lo hemos denunciado en este blog mil veces: es el leonesismo no político el que ahora mismo lleva la voz cantante en todo, mientras UPL se limita a ser recogedor de la opinión de los demás. Ni ideas, ni objetivos, ni proyecto. En UPL no hay nada de nada ¿Merecen nuestro voto?

UNA SEMANA PARA RECORDAR
Recapitulemos: se convocan dos concentraciones, y en ambas no acuden o los convocantes o la mitad de los miembros de dicha organización. UPL, partido que no solo no se ha negado en infinidad de ocasiones a cambiar la banda sino que la ha apoyado incondicionalmente, ahora recula porque no tiene votos, y mientras tanto, se re-inventa de nuevo un comité local, el de Villaquilambre, clave para el futuro del partido económicamente hablando. Y mientras se sucede el acto de los Héroes Leoneses, un acto en que se rememora a los que han luchado por el País Leonés, otros se dedican a cuestionarlo y criticarlo con toda clase de soflamas. Finalmente, a un colectivo leonesista se le ocurre que hay cambiar lo de la banda municipal tan incoherente y tantas veces reclamado su cambio, y eso da pie a que UPL (que se opuso desde siempre) justo ahora pida reformarlo.

Desde 2011, el gobierno de la comunidad tiene un consejero de fomento leonés, los de arriba de la foto se han turnado en el cargo. El nulo interés que muestran por el desarrollo de las infraestructuras de la tierra que les vio nacer es solo un ejemplo de lo que está sucediendo en la sociedad, la total desafección hacia lo leonés, no ya en lo identitario, sino incluso en cuestiones básicas en toda sociedad de bienestar. Si ustedes tienen oportunidad de hablar con un leonés que se manifieste contrario al leonesismo, a la autonomía del pueblo leonés, le alegará bastantes cosas: que si rechazo a los nacionalismos, que si falta de miras, un rechazo al concepto de las autonomías...pero el verdadero motivo es que el leonesismo no es capaz de demostrar su necesidad ¿Qué creen ustedes que piensan al ver las imágenes de antes? ¿Que es un movimiento serio con capacidad de aportar algo? ¿O por el contrario es un conjunto inconexo sin rumbo fijo? Si la respuesta es lo segundo, comprenderán el por qué estamos como estamos.

La labor del leonesismo no es salir a protestar cuando no te entienden. No hay labor pedagógica, educar, formar, dar a conocer. UPL comenzó siendo un partido que podía pedir cosas en Valladolid. Luego, viendo que sus acciones se limitaban a zapatazos en la mesa, solo se percibía como el partido tocacojones en Pucela, ni siquiera como una opción seria de gobierno. Ahora ya no llega ni a mosca cojonera. Lo que queda del leonesismo sociológico se limita a poner chistes entorno al 23 de abril con un San Ikea que solo ahonda en lo pobre de la situación. Porque mucho rechazo que haya a esa celebración, lo cierto es que diariamente estamos consintiéndolo y apoyándolo de modo pasivo.

Factores para entender la destrucción del leonesismo

En diciembre este blog adelantó el resultado de algunas encuestas que demostraban que UPL perdía intención de voto a marchas forzadas, y que ni siquiera su ¿alianza? con el PAL le libraría de una más que posible desaparición del panorama en varios puntos claves. En particular tres: ayuntamiento de León, ayuntamiento de Villaquilambre y Diputación de León. Perder el concejal en el ayuntamiento de León implica no llegar tan siquiera al diputado para la Diputación, lo mismo que el de Villaquilambre que, con la ya casi confirmada, "retirada" de Lázaro García Bayón, es ya casi un municipio perdido para el leonesismo. El único rescoldo que quedaría sería San Andrés, porque el resto de ayuntamientos pintan poco o nada en el cómputo global, pero de presentarse juntamente con el PAL perdería votos por razones que veremos luego.

LA PRIMERA ENCUESTA PÚBLICA LO CONFIRMA

Estos días ha salido a la luz otra de las tantas encuestas que hay, pero esta vez a través de La Crónica de León, confirmando lo dicho aquí: caída, no tanto como anuncia este medio, pero sí retroceso del PP. Y ojo, que no es por mala gestión de lo leonés y por extensión de la comunidad autónoma, sino por inercia de voto frente a Ciudadanos, que goza de más simpatías gracias a lo de Cataluña. La encuesta incluso cuestiona la pervivencia de UPL en el parlamento, algo que este blog no cuestionaría, saldría pero con margen relativamente escaso. Caída más brutal de Podemos, partido que a día de hoy se desconoce qué quiere exactamente y cómo lograrlo. Tal imagen devaluada se aprecia en absolutamente todos niveles, desde lo más simple y municipal hasta a nivel de estado. Misma imagen de la del PSOE, que ni renovando caras logra confianza entre los electores. Nos queda IU, que si logra su procurador será de chiripa.

Aunque todo esto es a nivel autonómico, no local, y si los partidos son capaces de generar una sinergia de voto, es decir, repetir lo que se vota en un lado y en el otro, los resultados no serían tan despreciables. Veamos dos ejemplos claros: León y Salamanca. En ambos municipios están dos "pesos pesados" del PP gobernando con mayoría simple. Y al igual que desvelamos los resultados de la encuesta, os adelantamos algunas de las conclusiones obtenidas internamente y que se expusieron en la reunión interna de los que encargaron la encuesta:

• Valoración del equipo de gobierno: en ambas ciudades leonesas, la percepción de la ciudadanía es de total atonía. No se aprecia nada nuevo, se ahonda en lo ya malo y no hay propuestas de soluciones. La incorporación, en el caso de León, de concejales no militantes como Margarita Torres, y más en una concejalía tan delicada como era cultura, ha aumentado esa sensación hasta convertirla en indolencia, si bien por ahora no se ha traducido en la pérdida de votos por dicha causa directa. En Salamanca no hay sensación de trabajar por atraer futuro a sus residentes en la capital leonesa que más población ha perdido en los últimos 20 años, solo se aprecian polémicas absurdas como la ley de la igualdad tumbada por el Tribunal Superior o no solventar un problema administrativo de tal magnitud como la legalidad, o ilegalidad, del suelo donde se levanta El Corte Inglés y que podría obligar a cerrar la superficie con todo el impacto laboral que implica.

• La oposición: no se aprecia que hagan absolutamente nada. Nula voz de Podemos en sus marcas blancas locales. Casi nula voz del PSOE, que se limita a emitir comunicados con una media de uno al mes. Y en el caso del único concejal de UPL para el cabildo leonés, la valoración ciudadana es realmente negativa, no llega al 4, pero es que ni la mitad de los encuestados fue capaz de valorarlo por desconocerlo. En la otra parte de la balanza se sitúa Ciudadanos, sigue ganando adeptos a costa, principalmente, del voto popular, y no por sus propuestas o gestión sino por la imagen irradiada desde algunos medios de comunicación. Lo cierto es que su estrategia de estar con el equipo de gobierno pero no estar con ellos, le está saliendo muy rentable. Eso sí, el desconocimiento del nombre y acciones de sus representantes es pasmoso

• Inactividad fáctica en cuanto a gestión municipal: ninguno de los dos ayuntamientos leoneses ha sabido generar una imagen de actividad municipal, entendida esta como la presentación de iniciativas, planes de reformas urbanas, mejora de actividades sociales...en el caso del ayuntamiento de León su única esperanza estriba en tres obras claves para la ciudad: la integración de la FEVE que lleva ya una década, la finalización del Palacio de Congresos (mismo tiempo que lo anterior), y un nuevo polígono de viviendas con su centro comercial que nadie sabe con qué población se podrá llenar. La capitalidad gastronómica, y eso ya lo apuntábamos en nuestra anterior entrada, está saliendo muy rana a todos los intervinientes (si podemos, daremos algunos datos en su momento). Posando la vista en Salamanca, todavía más sombría: la ciudadanía no aprecia ni un solo plan. En lo único que se incide sin cesar es en promocionar a Salamanca como ciudad con historia, turismo de interior, con resultados de impacto económico cero. Todo se traduce en más de lo mismo de los mismos con los mismos.

• Cansancio político generalizado: hay agotamiento social y generacional. Lo único que preocupa, junto con el empleo (5 y 7 de cada 10 entrevistados respectivamente) es la identidad española y la cuestión catalana, sentimiento exacerbado al punto del paroxismo gracias al machaque continuado de los medios de comunicación. No hay respuesta por parte de otras alternativas que no sean mantener un estatus quo y un modelo de España como el vigente.

¿Y CÓMO AFECTA AL LEONESISMO?

El panorama leonés se va a reconfigurar entorno a un partido que comienza a tomar el relevo del PP sin llegar a serlo, a un PSOE que quiere ser imagen de izquierda y no llega ni a zurdo mientras espera eternamente su momento, y un conglomerado de formaciones más que no han sabido ni vender su mensaje ni demostrar capacidad efectiva de acción. UPL se halla entre los últimos. Por muchos esfuerzos que haga Luis Mariano Santos pidiendo, reclamando y diciendo, a efectos prácticos el mensaje no ha llegado más allá del círculo sempiterno del leonesismo de toda la vida. El famoso bipartidismo camina en la senda de consolidarse, pero esta vez como bipartidismo ideológico y tripartito de facto.

El leonesismo político

La fusión de siglas leonesistas no se está percibiendo de un modo positivo, está aumentando más si cabe la sensación de que la intención no es desarrollar acciones leonesistas propias del marco ideológico, sino la pura y dura pervivencia de unas siglas y los cargos que conllevan (incluyendo los sueldos). A nadie se le escapa que es imposible tildar a PAL de leonesista. Tampoco que eso se presente como unión del leonesismo cuando el PREPAL está fuera de esta alianza, y por mucho que se justifique en las veleidades y egos de su fundador y máximo líder, esas mismas sentencias se pueden aplicar al milímetro con el PAL ¿Cuál es la diferencia? A eso sumemos el clan de los Matías Llorente, que perfectamente pueden marcharse con otra formación mañana mismo. Por ejemplo Ciudadanos Rurales Agrupados. Hay contactos.

En UPL siguen oyendo únicamente los aplausos y abriendo los ojos a las loas escritas que son emitidas en su inmensa mayoría por personas que ni votan ni residen en el País Leonés ¿Son esos los votantes que busca UPL? Y ahora veamos qué consecuencias negativas tiene la imagen del PAL: en San Andrés, desde que se incorporó al equipo de gobierno socialista, apenas se conoce nada de sus actividades que son fagocitadas mediáticamente por el PSOE. Sus dos áreas de gestión, Servicios Generales y Medio Ambiente tampoco es que estén cosechando triunfos, cualquiera que se pasee por los parques del municipio apreciará un gran descuido de poco tiempo a esta parte. Todo el trabajo de UPL allí, se verá mermado con la suma de siglas en las próximas elecciones por culpa de un concejal del PAL que se curró su puesto pero no sabe ejercerlo. Y los más avispados se habrán dado cuenta de por qué pidió Medio Ambiente: por dinero, es la concejalía que más comisiones tiene y por tanto más se cobra por asistencia. La huella del Pelines sigue perdurando en su linaje sucesorio. Mención aparte merece lo de Peyuca: se pasea por todo el municipio en plan pretendiendo dar imagen de actividad económica. Cierto es que su labor consiste en estar en contacto diario con los empresarios astorganos, pero la conclusión que se saca viendo sus reportajes fotográficos es que usa el trabajo de otros para promocionarse a base de selfis. Aunque eso  es mejor que estar sentado en el sillón.

Detrás de todo este trasfondo se oculta el hecho que flota en el leonesismo en general, sea político, social o cultural desde siempre: la carencia casi absoluta de leonesismo ideológico, formado y con objetivos definidos. El leonesismo ajeno a los partidos, camina ahora mismo en dos sendas muy diferentes: la vía cultural y social, y la vía política. Las diferencias son tan abismales que, salvo un milagro, caminan no solo a ser divergentes sino opuestas.

El leonesismo social y cultural

Aquí, la que más destaca es, sin lugar a duda, La Parva, una entidad surgida hace apenas un par de años y que en tan escaso espacio de tiempo ha sabido organizar diversos eventos con suficiente calado social como para recoger un testigo que estaba perdido desde que Pardo desapareciera de la escena pública: el llevar el leonesismo a la calle. En su entorno se han concentrado gentes leonesistas que desde un enfoque netamente cultural están llevando un mensaje donde el leonesismo político ni siquiera es capaz de vislumbrar. Desde una Fiesta de las Tradiciones Leonesas, pasando por la cabalgata de La Vieja del Monte y acabando por una serie de exposiciones y charlas sobre los reyes leoneses que, para más inri, se realizan casi todas ellas fuera de la provincia de León. 

Dentro de este mismo leonesismo social con enfoque cultural, por otro lado, están otros colectivos y entidades cuya existencia se concentra más bien en internet, en grupos privados de whatsapp, telegram y facebook, que en hechos reales. A veces surgen de allí surgen cosas algo más tangibles: recientemente ha aparecido una organización llamada Lliga Celta Llionesa, que dice defender las raíces celtas leonesas, ser estudiosos de los orígenes prerromanos leoneses, y que se presenta con una serie de charlas y actos en la ciudad de León.

Esta nueva entidad ha generado ciertas suspicacias entre algunas corrientes por ser una organización que se intuye cuasi heredera de otra asturiana incluso en el nombre, Lliga Celta D'Asturies, encabezada por un conocido asturianista (además invitado como conferenciante en su primer acto) con amplia militancia en movimientos del nacionalismo asturiano y que no ha tenido sonrojo en el pasado en decir que partes leonesas son en verdad asturianas. También hay que decir que el colectivo se presenta con un planigrama de charlas al respecto que apuntan buenas formas. El tiempo dirá la capacidad de acción que tendrán. Bienvenidos también.

Leonesismo social y político

En último lugar están las organizaciones de carácter político que se autodefinen como leonesistas. Hay que recalcar lo de la autodefinición porque en la práctica parece que si han de escoger entre la ideología de izquierdas o el leonesismo, este será algo secundario. Organizaciones que, salvo una, figuran únicamente en el imaginario cibernético, no están registradas en parte alguna. Aquí una pequeña muestra de mensajes compartidos:

Cartel compartido por varias de esas organizaciones. Exactamente el mismo que compartieron otros colectivos que desde siempre se han posicionado como anti leonesistas por considerarlo un movimiento burgués.

Llamada a una concentración por la muerte de un mantero en Madrid. Sí, en Madrid. Convocada anónimamente. Expresiones como "racismo institucional asesino" desde luego que generan si no rechazo, sí al menos suspicacia, y lo que más llama la atención es que se hagan concentraciones por algo a cientos de kilómetros de aquí ¿Nacionalismo? ¿Localismo? ¿Globalización? ¿Internacionalismo?

Casi hilando con lo anteior, y como se lee en el cartel, la charla es realizada por Concha Lucas, concejala en el ayuntamiento de León por Izquierda Unida. Dicho partido está radicalmente en contra de hablar tan siquiera de la situación leonesa en el marco autonómico actual. De nuevo el factor ideológico y no el identitario.

Este es quizás el mejor ejemplo de la contradicción: se firma un manifiesto a favor de la libre autodeterminación de Cataluña. La cosa está dentro del orden ideológico planteado. Pero lo interesante es por quiénes está firmado también: Izquierda Unida, Juventudes Comunistas, Partido Comunista de España o Red Roja, todos ellos colectivos que han atacado con gran virulencia en el pasado al leonesismo al que no han dudado un segundo en tildarlo con cualquier descalificación ¿Apoyan ahora la causa leonesa?

El resultado es que, si bien se cubre un espectro ideológico hasta ahora no tocado, no es menos cierto que en la práctica su leonesismo se ha traducido en actos y comunicados de consumo interno, y en el mejor de los casos ser una voz añadida dentro de una suma de entidades (véase documento previo) que poco o nada tienen que ver con el leonesismo cuando no están en su contra. Lo coherente sería mantener una línea equidistante aunque se comulge en otros fundamentos, pero se ha preferido aliarse con el otrora enemigo, siempre, insistimos, en pro de un principio ideológico y no identitario.

JUVENTUD, DIVINO TESORO...DEL ANTI LEONESISMO

¿Existe leonesismo juvenil? Pues quitando casos muy aislados, la respuesta es no. De nuevo gracias a las redes sociales, se ha sabido captar a las mentes más nuevas hacia posiciones ideológicas polarizadas a extremos donde si no eras de los míos es que estás contra mí. A tal punto de alienamiento se ha llegado que se opta o bien por la total indiferencia y apatía política o bien por posiciones extremistas donde el leonesismo tiene nulo espacio. Los que tienen hijos mayores de 14 años saben a lo que nos referimos. La labor del leonesismo, que debería ser entrar en esos nuevos cauces de comunicación, es nula, y no importa de quién o de qué entidad hablemos. El resultado es que probablemente, estemos asistiendo a la primera generación de votantes, aquellos nacidos a partir del 2000, que sientan interés nulo por la política o por ideología alguna. No hablamos como otras generaciones pasadas de cierta atonía o indiferencia, hablamos de total aislamiento. La gravedad que implica el total desapego de una generación entera es de dimensiones imposibles de evaluar, y cuyas consecuencias llevarían al menos otras dos generaciones poder revertirlas.

Las organizaciones de nuevo cuño de las que hablábamos antes, tan alineadas con la izquierda, bien podrían capitalizar a esa juventud, solo que su enfoque es nefasto. No se presentan con un modelo alternativo sino con una copia de dictados y mensajes de otros, con lo que su necesaria presencia se hace en realidad innecesaria. No ofrecen soluciones prácticas, solo crítica. El hecho de que ni siquiera figuren en registro legal alguno como entidades, por mucho que se quieran escudar en excusas varias, denota que no hay voluntad organizativa y sí una suma de conceptos que en cada mezcla se alejan poco a poco de lo que es defender la identidad leonesa. En la otra punta hallamos el pensamiento de la extrema derecha, que también cala y con fuerza entre los mozos cazurros, pero que es tomada como bandera no tanto por el PP como por Ciudadanos. La cantidad de jóvenes que pasean por la calle con pulseras con la bandera española, parches en ropa y la bandera ondeando en la habitación o por la ventana, crece cada día. Pero aun así ni hacia un lado ni hacia el otro hay un verdadero relevo generacional. El vacío ideológico y social es aprovechado por el anti leonesismo, tanto institucional como ideológico. Admiren este reportaje en El Norte de Castilla con respuestas de jóvenes que nacieron y solo conocen la comunidad de Castilla y León. Recomendable las palabras de los leoneses. 35 años hacen mucho daño. Imagínense los nacidos en el 2000. Hace 30 años era inimaginable que un niño leonés caminara por la calle con un chandal, parche o camiseta que pusiera "Castilla y León". Hoy no solo es normal sino hasta guay. El por qué lo sabemos, las medidas para contrarrestarlo son las que fallan por su inexistencia o ineficacia.

¿HAY SOLUCIÓN?

Todavía se está a tiempo de proponer soluciones a una situación que camina no ya al borde del precipicio, sino con un pie resbalando hacia el abismo. Para ello, y sin demora, deberían de fijarse planes concretos sintetizados en estos puntos:

1. Definición del leonesismo: no se ha definido. Preguntando sobre qué es leonesismo entre leonesistas, la variedad de respuestas, incluso contrapuestas entre sí, nos da idea de que a pesar de tantos años el pilar central y punto de partida no está ni siquiera definido.
2. Marco territorial: aunque es algo que afortunadamente se ha ido asentando y recobrando su realidad primigenia de País Leonés, todavía no se traslada completamente a la gente que se dice leonesista. Uno leonesista salmantino tiene visión muy amplia de la tierra, pero uno leonés no. Es más, el salmantino sabrá defenderse y argumentar muchísimo mejor que un leonés que ni siquiera se ha molestado en formarse porque nadie va a negar la leonesidad de la idéntica provincia. Pedagogía sería otro punto a añadir.
3. Planigrama: qué País Leonés quiero. Si se pide la autonomía habrá que saber cómo presentarlo y convencer a la sociedad leonesa de su necesidad. No vale la excusa de la legalidad o de la regionalidad histórica, a los leoneses se nos ha anulado ese derecho y por desgracia hay que ganárselo. Si no se entiende esto, no hay nada que hacer.
4. Propuestas y alternativas: como toda ideología, hay que advertir a la sociedad de las bondades de la misma y ofrecer respuestas claras, sencillas y contundentes. Y el discurso político es fundamental. UPL no ha sabido tenerlo. PREPAL se ha encerrado en un bucle del que no sale ni ganas que tiene. Y el PAL no es leonesista. Votar un partido leonesista no debe responder a una motivación ideológica sino también práctica, ese voto es útil y defiende por encima de todo los intereses de los leoneses. De nuevo, el ejemplo contrario: UPL votando a favor de la Catedral de Burgos. Sin comentarios.
5. Especialización: en el leonesismo hay demasiados maquis lanzados al monte y disparando a todo lo que se mueve. Metafóricamente estamos hablando de algunos nombres que se involucran en todo y al final no tocan en profundidad nada. La falta de un tejido asociativo y organizativo en todos los aspectos identitarios leoneses se traduce en que por ejemplo, en el tema lingüístico, se lleven todas las loas organizaciones que apuestan por un leonés filtrado en lo asturiano. Que en el tema de los pendones leoneses, resulte que se asocien con pendones burgaleses o palentinos, diluyendo lo que es en esencia un símbolo muy visible de la cultura leonesa... y así sigan ustedes sumando y concluyan lo que deseen.

Sí, todos esos puntos los hemos expuesto en este blog varias veces. Nos repetimos cansinamente, pero es lo que hay, nadie parece querer hacer caso. Si hasta al fecha no ha dado resultado la senda seguida ¿Por qué seguir? Cambiar de rumbo cuando no hay resultados demuestra sabiduría y experiencia. Seguir en él es pura cabezonería. Cazurro de manual. El resultado y lo previsible ni hace falta decirlo.

P.D.: en la última entrada hablábamos del desastre que sería lo de León capital gastronómica. Advertíamos de que el impacto sería bajo por no decir nulo. Pues bien, Diario de León publica esta noticia que ya, y solo en el primer trimestre, arroja un resultado muy pobre.