UPL Real 2010

comienza un nuevo año, otro tanto más o quizás uno menos. Depende de para qué y por qué. Los domingos son días monótonos siempre, mires a donde mires verás a parejas de clase media paseando con ropas de sport, hombres que en ridículos chándals bajan a comprar el pan, o mujeres ya muy mayores que visten ridículos abrigos de piel y se maquillan como si fueran indios arapahoe para exhibirse ante las masas dispuestas en la misa dominical.

Porque en eso consiste la sociedad leonesa: los cambios no suceden jamás si no los introducen desde fuera. Y UPL, como expresión de la auténtica política leonesa, es incapaz de innovar en nada y tan solo asume lo que otros quieren imponer o se limita a la pura imitación, nunca alcanzado el grado de excelencia ni siquiera en eso.

No quiero una UPL que va a salto de mata. No quiero una UPL que siente rubor por ser leonesista. No quiero una UPL que dice no a hablar con partidos nacionalistas no siendo que la metan en el mismo saco. No quiero una UPL que solo le preocupa Valladolid y no Madrid salvo para defender la unidad de la patria y gritar que es regionalista ¡ay, Carretero, cómo recuerdo tus palabras de que Madrid se defiende por sí sola en el Parlamento! Y el único que era la nota discordante, o coherente, van y se lo cargan.

La destitución de Abel Pardo ha marcado un punto de inflexión tan gravísimo que ni los mismos que lo hicieron son tan siquiera a percibirlo. En estos periodos natalicios he podido mantener conversaciones con muchas personas, afiliadas o simpatizantes de UPL o tan solo leonesistas a secas. En todos, absolutamente en todos, está presente la cuestión pardiana. Muchas gentes que en otros tiempos incluso lo defenestraban ahora es un símbolo de que en el partido y en general en el leonesismo algo no funciona.

Pardo no hizo absolutamente nada que fuera en contra del partido. Ni siquiera el supuesto daño mediático (alimentado e incitado por "ciertos" miembros de UPL) es tal si tenemos en cuenta que todo a respondido a un medido ataque para destrozar y desprestigiar a una persona y por extensión a una ideología. La lealtad, que no el seguimiento de la línea oficialista del partido, de Pardo es incuestionable. Ofertas ha tenido de otros partidos. Me consta que muy fuertes desde el PP tanto en la legislatura pasada como en ésta. Pudo ser muchas cosas en otros partidos, pero su leonesismo le puede.

Los que quedan con cargos en el ayuntamiento de León tomaron las concejalías de Pardo y lo que hacen es...seguir con lo mismo. Bueno, no todo, por ejemplo el tema de la lengua leonesa donde Chamorro empieza a retroceder no siendo que le señalen demasiado. Gema Cabezas sigue en su línea de poner puertas al campo y hasta me han llegado a comentar que tiene algunos proyectos que ciertos "enemigos políticos" (léase del PSOE, que en su caso son de la familia) le están sugiriendo al oido. Cabezas tiene idem para eso y para más, así que nos deslumbrará con alguna patochada.

Y Pardo está hasta feliz. O al menos lo parece. Se ha cortado el pelo ¡por fin!, se le ve un poco mejor vestido y hasta con alguna sonrisa. Demasiado trabajo quizás. Hasta recibió bastantes apoyos y vivas en la cena anual de navidad del partido. Me ha comentado cierta mala lengua que incluso le ha venido bien pues ha desenmascarado a los leonesistas de verdad de lo que no lo son ¡pobre ingenuo si necesitaba esto! Pero la politica municipal es lo que tiene: a veces eres el superior en el trabajo y un subordinado en el partido.

¿no lo pillais? Pardo era concejal de nuevas tecnologías. ¿y quién es trabajador municipal que NUNCA pasa por su puesto de trabajo, y es a la vez alcalde de un ayuntamiento? Bien pudo hacer algo en su momento por ese absentismo laboral. Y bien pudo don Lázaro hacer algo en el momento de debilidad de su jefe.

UPL sigue dominado por pusilánimes, por indefinidos ideológicos, por mucho rancio y poco aire fresco, por mucha demagogia y poca puesta en marcha, por mucha palabra y poca acción, confitado todo con un crepúsculo de pelotas bien alimentados y pagados. Jefes de prensa manipuladores, comunicadores parciales capaces de vender a su madre, políticos condenados en sentencia firme, expulsados que ahora ya no lo son sin saber ni un motivo ni el otro, ideología inexistente, falta de acción y respuesta ante los adversarios políticos, las leyes se violan e interpretan al gusto del dictador de turno, no hay participación abierta. Es, en resumen, bastante leonesa, más que nunca.

En el 2010 UPL tendrá que afrontar un congreso de renovación, uno de verdad. Ni el alcalde condenado en tribunal tiene todas sus cartas a su favor, ni la línea oficial juega con todos los ases. Y en medio hay otro nombre que de tan nombrado en los últimos meses es mejor que no asome demasiado no siendo que le corten lo poco que le queda. Por otro lado sumemos a todos los grupos descontentos, comités locales y comarcales que ni siquiera reciben información de su partido, afiliados que se plantean muy seriamente dejar de serlo con carta incluida, concejales que solo esperan a la próxima legislatura para cambiar de chaqueta... y un movimiento leonesista que sigue muy vivo pero muy quemado de su clase política.

Así que en este 2010 que comienza a andar voy a pedir buenos deseos. Concretamente uno: que UPL responda única y exclusivamente al leonesismo, que es su ideología.