Da gusto cuando sabes que tus palabras tienen eco. En la anterior entrada se habló de la pasividad y nula acción de UPL en respuesta social y capacidad de movilización. Lo que son las cosas, a los escasos días nos dicen que quieren hacer una manifestación por el cierre de vuelos en el aeropuerto de León. Dicen que el día 10 de marzo. No dicen ni lugar ni hora. Primer desconcierto.
Imagen de la rueda de prensa de UPL convocando la manifestación. (foto de lainformacion.com)
El de la derecha es Eduardo López Sendino, para los que no lo conozcan el concejal por León junto con Chamorro. El de la izquierda es Miguel Ángel Lozano González, alcalde de Matadeón de los Oteros y actual secretario de comunicación. Es importante este dato porque muchas veces no sabemos quién está realmente detrás de bastantes decisiones. Próximamente vais a tener aquí un especial del sr. Lozano, todo un personaje del que hay que contar y muchas cosas de sus andanzas políticas, especialmente su habilidad recientemente adquirida y bien aprendida de apuñalar vilmente a sus colegas.
El caso es que las palabras de UPL, y ya empiezan a ser la norma, caen en saco roto y son tomadas como un teatrillo de los que antiguamente recorrían los pueblos: hacen gracia, te entretienen un rato pero desde luego que ni te enriquecen ni te hacen pensar, reflexionar y menos aún actuar. Así lo debieron de pensar sindicatos, colectivos empresariales y hasta asociaciones. En una noticia que como también ya es norma solo recoge leonoticias, se decía que los sindicatos apoyaban la manifestación de UPL y hasta sus líderes salían dando palabras grandilocuentes. Apenas unos días después sale la plataforma "Más Vuelos", da una charla conferencia con bastantes figuras de autoridad y dice que convoca una manifestación al día siguiente en el propio aeropuerto.
La charla, hay que decirlo, tuvo y mucha altura. No es ningún juego de palabras. Lago demostró con datos que el aeropuerto de León es necesario y viable. Los representantes del comercio señalaron la importancia del mismo y la incidencia indirecta notable que tendría para el sector. Las preguntas y opiniones del público asistente también tuvieron su enjundia y todos reflejaban a fin de cuentas que el trato que recibía el aeropuerto leonés no es ni por asomo el mismo que el de Valladolid.
De tal convocatoria que se planteó tras la charla no se enteró casi nadie. Ni siquiera se dio un margen de tiempo de operación para que los que quisieran acudir a la protesta lo hicieran. El resultado, al menos en participantes fue más bien pobre, pero a la vez muy significativo: representantes del mundo empresarial, deportistas como Manuel Martínez, representantes sindicales y otras figuras con cierta trayectoria estuvieron presentes. Esta pequeña pero significativa concentración realizó a continuación otra rueda de prensa y anunció la convocatoria de una manifestación que sustituirá a la de UPL para "que sea apolítica".
De todo lo anterior caben sacar muchas lecturas, pero se pueden resumir todas en una sola: la Unión del Pueblo Leonés ha perdido por completo su capacidad de movilización y de captación de mensajes de la sociedad. Lejos quedan todas esas campañas que hiciera en el pasado tanto UPL como sus juventudes Conceyu Xoven. Muchas quizás no lograran "per se" el resultado que se buscaba pero sí que fueron al menos una parte importante de la reivindicación y lograron remover conciencias. En definitiva, que el tema fuera al menos por un tiempo considerable, cuestión de actualidad.
La improvisación que reina y gobierna en UPL está pasando factura y su coste es mayor que la deuda financiera que arrastra. Improvisación y un toque de cinismo. Cinismo porque:
En UPL tratan de arrancar un partido que es incapaz de moverse a pesar de tener la meta tan cerca. El leonesismo político representado por la Unión del Pueblo Leonés está tragando como puede las últimas bocanadas de aire que le quedan y cogiendo todo lo que puede antes de que el castillo de naipes en que se sustenta caiga por el vuelo de un mosquito. Improvisación, improvisación e improvisación ¿Se puede hablar de alternativas?
La charla, hay que decirlo, tuvo y mucha altura. No es ningún juego de palabras. Lago demostró con datos que el aeropuerto de León es necesario y viable. Los representantes del comercio señalaron la importancia del mismo y la incidencia indirecta notable que tendría para el sector. Las preguntas y opiniones del público asistente también tuvieron su enjundia y todos reflejaban a fin de cuentas que el trato que recibía el aeropuerto leonés no es ni por asomo el mismo que el de Valladolid.
De tal convocatoria que se planteó tras la charla no se enteró casi nadie. Ni siquiera se dio un margen de tiempo de operación para que los que quisieran acudir a la protesta lo hicieran. El resultado, al menos en participantes fue más bien pobre, pero a la vez muy significativo: representantes del mundo empresarial, deportistas como Manuel Martínez, representantes sindicales y otras figuras con cierta trayectoria estuvieron presentes. Esta pequeña pero significativa concentración realizó a continuación otra rueda de prensa y anunció la convocatoria de una manifestación que sustituirá a la de UPL para "que sea apolítica".
fotografía de leonoticias.com
De todo lo anterior caben sacar muchas lecturas, pero se pueden resumir todas en una sola: la Unión del Pueblo Leonés ha perdido por completo su capacidad de movilización y de captación de mensajes de la sociedad. Lejos quedan todas esas campañas que hiciera en el pasado tanto UPL como sus juventudes Conceyu Xoven. Muchas quizás no lograran "per se" el resultado que se buscaba pero sí que fueron al menos una parte importante de la reivindicación y lograron remover conciencias. En definitiva, que el tema fuera al menos por un tiempo considerable, cuestión de actualidad.
La improvisación que reina y gobierna en UPL está pasando factura y su coste es mayor que la deuda financiera que arrastra. Improvisación y un toque de cinismo. Cinismo porque:
- contrariamente a lo que quieren demostrar UPL por mano de D. Javier Chamorro Rodríguez no hizo absolutamente nada de nada cuando su compañero de partido D. Abel Pardo Fernández tenía una oferta de Ryanair para tener varios vuelos internacionales con salida desde León. Y decimos nada porque guardó un escrupuloso silencio y en ningún momento, a pesar de ser miembro de las comisiones de transporte del ayuntamiento de León desde hace más de 12 años, ha hecho una sola propuesta constructiva a favor del aeródromo salvo iniciativas pobres a retahila de noticias para luego dar la rueda de prensa oportuna.
- Esa misma inoperancia la lleva ejecutando por activa y por pasiva D. Lázaro García Bayón, actual miembro del consorcio aeroportuario leonés en la diputación, que votó favorablemente todas y cada una de las propuestas hechas desde dicho ente, incluyendo las de no hacer nada por el aeropuerto y delegar todo en la junta.
- Porque hasta el día de hoy UPL ha demostrado abiertamente que no tiene ni repajolera idea en la práctica totalidad de temas. Como ejemplo último más claro, y hablando de aeropuertos, el propio Chamorro ha tenido el santísimo valor de apoyar a Lagunair y decir que su cierre se debió a la mala gestión del consorcio. Chamorro ignora, o querrá ignorar por conveniencia personal, que la ruina de Lagunair se debió única y exclusivamente a pactar unos vuelos bajo subvención a destinos surrealistas como Badajoz para gloria y alabanza del PSOE y sus amigos empresarios llamados Santos Llamas e Ignacio Tejera, ambos salpicados de demasiados escándalos sobre ayudas, dineros y demás hierbas.
En UPL tratan de arrancar un partido que es incapaz de moverse a pesar de tener la meta tan cerca. El leonesismo político representado por la Unión del Pueblo Leonés está tragando como puede las últimas bocanadas de aire que le quedan y cogiendo todo lo que puede antes de que el castillo de naipes en que se sustenta caiga por el vuelo de un mosquito. Improvisación, improvisación e improvisación ¿Se puede hablar de alternativas?