En UPL se está librando una batalla donde el juego sucio ha subido un escalafón y ahora está en la pura y dura batalla personal. Incluso en política existen unas reglas de juego no escritas que deben respetarse y observarse aun cuando en algunas ocasiones no son justas o del agrado.
Durante el proceso electoral se niega el acceso a las listas de afiliados y hasta su número de teléfono. Jamás antes sucedió. El presidente de partido, vicealcalde, procurador de tribunales y hombre con ya cierta experiencia en política, caiga en la pataleta y rabieta más infantil para escribir con insultos y lanzar amenazas. O inventarse noticias en complot con un medio para justificar otra rueda de prensa donde cargar contra Pardo en un momento de máxima debilidad personal e imposibilitado a defenderse.
El culmen (si no quedan más episodios) de todo esto es lo que sale publicado hoy en elsoplon.net, desagradable hasta hartar. Puede dudarse bastante que Moreno hiciera una agresión gravemente violenta pues no es precisamente un gigante ni su forma física invita a actividades de mucho esfuerzo, aparte de que hace poco tiempo sufrió algunos problemas en los brazos. Pero también puede dudarse de que la actitud de Moreno fuera la más correcta.
Los nervios se están perdiendo: Chamorro insultando en prensa y Moreno agrediendo a una mujer. No se cae más bajo porque ya están en el suelo. A este punto se pinta harto difícil relanzar a UPL, pues gane quien gane tendrá al otro enfrente y una imagen difícil de limpiar. El leonesismo sigue necesitando imperiosamente de sumas y no de restas, pero por aquí las únicas operaciones que se ven son las de quién va a sentarse en un puesto de la nueva entidad financiera o qué futuro laboral espera tras el 2011.
Gane el que gane ¿UPL podría seguir teniendo futuro? O toma el poder una persona claramente leonesista y con visión política o lo único que se tendrá en el mejor de los casos es gente con muy buena voluntad pero nada más. En política no valen solo las buenas voluntades. Chamorro supondría lo que ya conocemos: nada de leonesismo y sí mucho mafiosismo y chanchullismo. Tejerina lo desconocido pero con aspectos tampoco brillantes de todo: en su equipo hay personas que generan poca confianza y sí ansias de protagonismo. Podríamos decir que incluso ni siquiera son leonesistas. Algunos quisieron ir en la línea oficial y no pudieron. Llegaron hasta de su mano, comieron y bebieron de ella. Ahora la muerden. Mal curriculum.
¿quiénes son esas personas? paciencia...
Apunte final: la candidatura de Isidoro Díez Valdeón, que iba con un número grande de avales, se descuelga de la carrera. El peso pesado que le sustentaba prefiere seguir con los oficialistas y renegar de su pequeño as guardado en la manga. Enrique Soto se pega como una lapa al oficialismo con el apoyo del único militante del comité astorgano que todavía le queda fiel, y el zamorano Pedro Gallego sigue por su lado y marcando distancias ¿seguirá hablando y reuniéndose con los zamoranos Melchor Moreno para decir lo bien que lo están haciendo allí la línea del partido? ¿o por el contrario ahora cargará contra Zamora y hablará que si son pocos o que son amigos de quién sabe como ha hecho con el comité Salamanca? De ello lo sabremos por medio de otro confidencial redactado por Felipe Ramos en Diario de León previa información de Melchor Moreno.
¿Pero quién pensábais que contacta con Diario de León para contar las miserias upelianas?
Melchor Moreno se presenta a las elecciones en su pueblo por la UPL ya en 1995 (617 votos, 31,29%, 4 concejales).
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